Verdemar-Ecologistas en Acción ha denunciado ante el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) la esquilmación de una colonia de lapa ferruginea (
Patella ferruginea) en la playa del Rocadillo, en Guadarranque, San Roque.
Se trata de una especie en peligro crítico de extinción que cuenta "con el mismo grado de protección que el lince ibérico".
Según ha explicado a Europa Press el portavoz del colectivo ecologista en el Campo de Gibraltar, Antonio Muñoz, esta lapa está catalogada en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. Apunta que se trata de una especie hermafrodita que "cuando es pequeña es macho y cuando llega a una edad de unos 40 años se convierte en hembra y es cuando se reproduce", lo que explica que esté "superprotegida".
Abunda que, según el censo realizado por la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente en 2010, siguiendo los criterios de la 'Estrategia de Conservación de la lapa ferruginea (Patella ferruginea) en España', Andalucía cuenta con una población que no llega a los 1.800 ejemplares de esta especie.
"CASI UN CENTENAR"
Relata Muñoz que la denuncia fue interpuesta después de que localizaran en la playa sanroqueña "casi un centenar" de conchas vacías de esta lapa, las cuales habrían "dejado tiradas después de sacarle el bicho". Se trata de una cifra "absolutamente escandalosa", enfatiza.
El asunto está siendo investigado por el Seprona de la Guardia Civil, a la que han informado de que varios testigos afirman haber visto a "un grupo de personas de origen asiático en dicha playa con un martillo y un cincel para conseguir estas lapas".
Cabe señalar que la captura de animales catalogados en peligro de extinción, tipificada como muy grave en la Ley de la Flora y Fauna Silvestres de Andalucía, puede ser sancionada con una multa de 60.101,22 a 300.506,05 euros.
Otra muestra de la importancia de esta lapa es que su protección es uno de los argumentos que justifican la denuncia interpuesta por el Gobierno contra los rellenos que está haciendo Gibraltar ganándole terreno al mar para ampliar su territorio, ya que la legislación establece que debe someterse a autorización "la realización de obras costeras en las áreas críticas para la lapa ferruginea".