La victoria en Almería ha supuesto un paso importante para el Algeciras en la tabla, alejándose de los puestos de descenso y por fortuna no ha tenido que lamentar su falta de acierto del duelo del miércoles ante el Melilla. En el caso de los albirrojos, todo es cuestión del color con que se mire, pero la calve está en las dos porterías, en la propia y en la del rival. ¿Está el vaso medio lleno? ¿Está medio vacío?.
Por un lado, el aspecto defensivo es el que más culpa tiene de todo lo bueno que le pasa al equipo. Los albirrojos, pese a ser 12º en la clasificación, son el quinto equipo menos goleado del grupo. Sólo tres de los cuatro primeros (La Hoya, con siete goles en contra, y Albacete y Cádiz, con ocho), además del Lucena (8), reciben menos tantos que los albirrojos, lo que les convierte en una de las defensas más fiables del grupo.
Sin embargo, la culpa de que el equipo no ande un poco más arriba en la tabla es de la dificultad de los algeciristas para anotar goles. Son el cuarto equipo menos anotador del grupo, por detrás de Almería B y San Fernando (7) y Córdoba B (9), todos ellos en puestos de descenso, e igualados con Lucena, Sanluqueño y Écija (10), el último de ellos también en descenso. ¿Medio lleno? ¿Medio vacío? En cualquier caso, a ocho puntos del descenso.