El diputado en el Congreso, Francisco González Cabaña, ha reafirmado esta mañana “la posición inequívoca y en todos los frentes del PSOE en defensa de la titularidad pública de la Finca La Almoraima”. Así, recuerda que a las iniciativas presentadas en los ayuntamientos de Jimena y Castellar y en la Diputación provincial, se une la proposición no de Ley que ha elevado al Congreso y está pendiente de debatirse en la Comisión de Agricultura, Medio Ambiente y Pesca.
En la iniciativa que defenderá el diputado gaditano, el Grupo Socialista, tal y como ya respaldase en el Parlamento andaluz, muestra su rechazo a las pretensiones del Ministerio de Medio Ambiente de vender y privatizar la finca pública La Almoraima y en el mismo sentido, los socialistas reiterarán la solicitud al Ministerio de cesión de la finca para que sea gestionada por la Junta.
El Grupo Socialista rechaza «radicalmente» la iniciativa del Gobierno central de privatizar la finca «convirtiendo algo público en un negocio privado» ya que, a juicio de González Cabaña, «pone en riesgo la continuidad de uno de los pilares socioeconómicos más importantes para las zonas rurales del Campo de Gibraltar y de la provincia”. Del mismo modo, ha alertado “del riesgo de dañar irreversiblemente uno de los parajes medioambientales más importantes de Andalucía, el parque natural de Los Alcornocales, en el que se integran más de 12.700 hectáreas de las 14.100 que tiene la citada finca”.
González Cabaña ha subrayado que “el Gobierno socialista invirtió más de diez millones de euros, entre 2009 y 2010, para mejorar las infraestructuras y la gestión integral de la finca, lo que claramente no casa con el bulo que el Ministerio de Medio Ambiente ha puesto en circulación sobre esas supuestas intenciones privatizadoras del Gobierno socialista”.
“España entera está en venta y es por el afán del PP de hacer caja como sucede también con la nueva Ley de Costas, aun a riesgo de perder espacios del alto valor medioambiental de la finca La Almoraima, esa es la realidad”, según González Cabaña que muestra sus sospechas de que “los nuevos propietarios de la Finca que está orientándose hacia el exclusivo turismo de lujo al alcance de muy pocos bolsillos vayan a garantizar el mantenimiento de todos los puestos de trabajo”.
González Cabaña recuerda que frente a ese modelo de explotación elitista que pretende el PP, “la producción de corcho, la explotación cinegética, las actividades agrícolas y ganaderas y las de turismo rural son sus pilares actuales y pueden generar en un futuro a corto y medio plazo otros tipos de recursos y aprovechamientos en el caso de que la gestión y la titularidad fuera de la Junta de Andalucía”. “Si la actual plantilla es de 54 trabajadores fijos más algunos eventuales, estamos seguros de que desde el Gobierno andaluz se haría un aprovechamiento más eficiente de la finca y con un mayor impacto laboral sobre la zona”, ha precisado.