Izquierda Unida de La Línea ha manifestado, a través de un comunicado, que "en el día de hoy es un insulto a la inteligencia y a la aconfesionalidad del Estado el nombrar a una imagen religiosa como cargo público honorífico de un municipio. Cargo de connotaciones claramente de la esfera política que no aporta ni engrandece otros aspectos de esta imagen religiosa. Es una imposición a la ciudadanía, pues ya está en la practica concedido y puesto en marcha sin necesidad de este pleno al que solo venimos para junto a la pátina de populismo le añadamos la de proceso democrático".
"Algunos partidos no acaban de tener una idea clara de la laicidad institucional que les corresponde y obliga constitucionalmente a los órganos del Estado", sostienen, y añaden que "estos acuerdos vulneran la libertad de conciencia de la ciudadanía y suponen un trato de favor y discriminación a otras creencias y convicciones".
"Exigir esa neutralidad no implica una actitud antirreligiosa hacia aquellos ciudadanos que desde su libertad y esfera privada creen en la Inmaculada, al contrario, supone una actitud de convivencia y respeto que en el siglo XXI nos hemos ganado y dado toda la sociedad a nosotros mismos", aclaran.
Consideran que "es el respeto a las convicciones y las creencias de cada persona lo que obliga al Estado a no favorecer ni enaltecer a una creencia religiosa determinada sin convertirse en Estado confesional. El cariño real que algunos ciudadanos sienten hacia la imagen de la Inmaculada no es con este nombramiento de Alcaldesa con el que se van a sentir identificados. Porque ese cariño es personal, privado y ni quiere ni pide intromisiones políticas en él".
"Nuestra Constitución dice que los poderes públicos debemos ser aconfesionales, si el PSOE y el PA de La Línea no están de acuerdo, son muy libres de plantear dentro del marco constitucional lo que desean, y por ello pueden incluso pedir que se modifique la Constitución y no avancemos en el camino de convivencia que nos hemos dado, pero en el día de hoy es un sinsentido", añade el comunicado.
Desde la formación linense de IU estiman que "vivimos en una sociedad revuelta y en tiempos confusos, ni mejor ni peor que otros tiempos pero revueltos y confusos. Con grandes contradicciones, y la situación de lo religioso lo sufre en demasía. Abogamos por la retirada de crucifijos en las escuelas que las pedimos a voces públicas y laicas. Incluso aceptamos peticiones de no poner un belén si hay alguna voz discrepante en una determinada comunidad educativa".
"La acción de hoy ha necesitado el cambio de la propia reglamentación municipal. Y se propuso antes el cargo incluso de su existencia en nuestro reglamento de honores y distinciones. No puede por menos que sorprendernos que haya sido el PSOE el que haya impulsado este acto, y no queremos ni pensar que lo haga contra su propia evolución histórica como partido por el simple acto de contentar a una parte de la ciudadanía y arañar unos votos o apoyos. Este acto lo hubiéramos comprendido que no apoyado, pero comprendido mejor pues sería lógico en el PP y el PA que siempre han asumido con naturalidad su papel al lado de la Iglesia Católica. Pero de aquellos que están dando un nuevo giro a la izquierda no ha dejado de sorprendernos", afirman.
"La frase 'dad a Dios lo que es de Dios y al césar lo que es del césar' parece que tras XX siglos de historia aun no hemos sido capaces de entender el sentido de separación Iglesia -Estado al que nos invita", manifiestan.
Por último, señalan que "el equipo de Gobierno PSOE-PA debería hacerse eco del principio de convivencia al que aboga el Papa Francisco I con sus palabras "mantenimiento de un estado laico como forma de convivencia pacífica entre las diferentes religiones. Política y religión pueden y deben y conviven juntas sin mezclarse ni confundirse".