El Grupo Transfronterizo (GT), organización que aglutina a organizaciones sindicales y empresariales de Gibraltar y el Campo de Gibraltar, anunció ayer que espera, en el transcurso de 2016, tener lista para su aprobación por Bruselas la documentación con los estatutos de la Agrupación Europea de Cooperación Territorial (AECT). Así lo aseguraron ayer durante un desayuno informativo en la cafetería Modelo, de La Línea.
Esta figura institucional, que ha sido públicamente apoyada por los ayuntamientos de La Línea y San Roque y por el propio ministro principal del Peñón, Fabian Picardo, permite a los colectivos integrados en el grupo -que no al propio GT- acceder a fondos europeos para poner en marcha proyectos fronterizos de cooperación en campos tan variados como la educación, el comercio, el empleo y las infraestructuras, como señaló ayer la componente del grupo y secretaria comarcal de CCOO Inmaculada Ortega.
El exalcalde linense y portavoz del GT, Juan Carmona, reveló esta previsión de plazos, que no obstante depende también de la aprobación inicial del Gobierno Central. Si bien, aclaró, el Ejecutivo tendrá que aceptar la propuesta siempre y cuando esta cumpla los requisitos legales, aunque también reconoce que podría retrasarlo. En ese caso, pedirían el amparo de Bruselas.
La AECT está colaborando de manera activa con el Departamento de Derecho Internacional de la UCA, al mando del cual está Alejandro del Valle. La idea es desarrollar un comité técnico que defina la hoja de ruta para crear los estatutos de la AECT, que se empezará a trabajar a primeros del año que viene. En el transcurso del año esperan enviarlo a Bruselas, previa aprobación de España.
Desarrollo satisfactorio
El secretario comarcal de UGT, Ángel Serrano, integrante igualmente del GT, explicó la evolución del colectivo desde su creación, en enero de 2014, y valoró que ha servido para “imprimir velocidad” a los políticos en la solución de problemas como el de las colas, como demostraría, a su juicio, la frontera inteligente.
Sin embargo, el actual presidente del GT, el empresario gibraltareño John Isola, puso énfasis en que la frontera inteligente “ha mejorado” la situación, pero que “se tendría que ver si es algo que funcionará a largo plazo”, insistiendo en la necesidad de mayores recursos humanos y materiales. IOrtega recordó, a su vez, que han pedido cinco carriles de entrada y cinco de salida.
Frontera comercial
Otro aspecto en el que incidió ayer el GT es la necesidad de ampliar el horario de la frontera comercial, actualmente hasta las 15.00 horas. Mencionaron que, en una reunión reciente con el presidente del PP de La Línea y coordinador de la Administración General del Estado (AGE), Nacho Macías, se planteó la posibilidad de trasladar a Madrid la idea de abrir dos horas más la frontera comercial.
Por último, también mencionaron las trabas que supone que las mercancías tengan que pasar antes por el puerto de Algeciras que por la frontera por la falta de medios suficientes en la Verja.
Empresas
El presidente del Grupo Transfronterizo, John Isola, puso ayer de manifiesto en su encuentro con los medios que el principal motivo de que las empresas gibraltareñas no inviertan en el Campo de Gibraltar es la “falta de confianza” en que la inversión genere beneficios a causa de la “falta de estabilidad” política.
A este respecto, Juan Carmona añadió que esta cuestión no tiene necesariamente que ver con el partido en el gobierno, sino más con la “personalidad” del ministro, aludiendo a que, en su día, las relaciones fueron buenas con el ministro popular Josep Piqué y, sin embargo, fueron malas con un gobernador socialista que “se tomó por lo personal lo de Gibraltar español”.
Ambos coincidieron en señalar que un pacto de estado sobre la cuestión de Gibraltar, “que definiera qué objetivo final hay y qué camino se va a seguir”, precisó Carmona, sería lo “ideal” para generar esa confianza y generar esas inversiones.
Isola intervino de nuevo a preguntas de los periodistas sobre sus preferencias con respecto a las elecciones generales, y está en desacuerdo con que con uno de los partidos sea más fácil que con otro. “Creo que quienes no quieren que funcione esto se están dando cuenta de que la ciudadanía apoya el trabajo del grupo y están cambiando”, dijo.