El Juzgado de Instrucción de Gibraltar ha comenzado esta semana una investigación judicial para esclarecer el crimen de Boschetti's Steps, el más grave ocurrido en el Peñón y que se produjo el 30 de marzo.
Según informa la televisión pública de Gibraltar GBC, según el patólogo Nathaniel Cary el hombre, de 31 años, murió a consecuencia de un corte en la garganta, en lo que calificó como "una típica herida autoinflingida".
En los datos aportados en el juzgado se señaló, asimismo, que su pareja, y sus hijas, murieron por heridas de arma blanca en el corazón.
Los cuerpos de la mujer y de la niña de 4 años (hija de una pareja anterior de la víctima), examinados por el patólogo forense Nathaniel Cary, mostraban evidencias de "heridas defensivas" en brazos y manos, además cortes en la cara. El bebé, de seis semanas, sin embargo, pudo haber muerto después de un "episodio único" de violencia en "pocos segundos".
Según la GBC, la investigación señala que el hombre podría haber muerto "en algún momento después de los otros tres". Su garganta cortada, según dijo el doctor Cary, mostraba un "tipo muy típico de herida autoinfligida", aunque también presentaba varios cortes y pequeñas puñaladas, que también podían haber sido autoinfligidas, aunque el forense no podía descartar si habían sido infligidas por otra persona.
Además, los resultados de toxicología reflejan que el varón superaba en tres veces el límite de esteroides en sangre del Comité Olímpico, y que la adición a estos pueden causar cambios en el comportamiento, incluyendo la agresión, cambios de humor y la paranoia.
La investiagción arroja que no hay indicios de que otras personas pudieran estar involucradas en las muertes. De hecho, no se halló otro ADN y las puertas de entrada a la vivienda estaban cerradas con llave y las ventanas del inmueble, de un amigo de la familia que se lo había prestado por unos días, tenían rejas.