David Sanz tiene 23 años y desde hace tres gestiona junto a su padre Manuel y a su hermano Lucas Rutas del Sur, especializada en el turismo activo. Es una empresa de Algeciras que organiza excursiones en el Campo de Gibraltar, Costa de la Luz, rutas por los pueblos blancos de Cádiz o por Marruecos, con la particularidad que te adentrarán en la cultura de Cádiz, Tarifa, Algeciras o Gibraltar, entre otros destinos. Con ellos se puede recorrer la ruta Paco de Lucía y adentrarse en la vida del genial guitarrista o adentrarte en las singularidades de la población gibraltareña. Rutas del Sur nació como proyecto final de carrera de David y por ahora es el medio con el que la familia está obteniendo ingresos. “Empezamos de cero y nos va bien. Poco a poco, porque no es empezar y hacerte rico”, asegura David, quien explica con orgullo que su cartera de clientes está subiendo. Ya los tienen hasta del extranjero: alemanes, estadounidenses o brasileños.
Silvia Prado y Elena Ortiz fundaron hace un año Artemisa, también en Algeciras , una empresa dedicada a la organización de rutas para mostrar el patrimonio natural y cultural. Entre sus servicios está el programa “Correlimos”, por el que enseñan el Parque del Centenario de Algeciras o una ruta para conocer el río Pícaro o el Arroyo de Algamasilla.
También organizan el denominado “Desayuno con espías”, partiendo del mítico hotel Reina Cristina y mostrando los túneles por el que en otros tiempos transcurrió la trama del espionaje. “Los comienzos siempre son duros, pero no nos podemos quejar. Vamos avanzando y tenemos confianza porque no nos va mal y no estamos ni al diez por ciento de nuestro potencial”, asegura Silvia.
David, Elena y Silvia han coincidido esta semana en el I Congreso de Ecoturismo del Campo de Gibraltar que ha organizado el Ayuntamiento de Algeciras en el que ha participado más de un centenar del Campo de Gibraltar, en su mayor parte profesionales implicados en el impulso del ecoturismo en el territorio, como empresarios y emprendedores del sector turístico, ayuntamientos y representantes de administraciones ambientales y turísticas. Además, se ha contado con numerosos expertos y experiencias de referencia de Andalucía y el resto de España.
En el congreso se puso de manifiesto que el Ecoturismo es una actividad beneficiosa para la conservación y la economía local, y por lo tanto, el más adecuado a desarrollar en los espacios protegidos. Este tipo de turismo con perspectivas prometedoras de crecimiento, ayuda a diversificar y desestacionalizar la actividad turística, y suele captar un perfil de viajero responsable y, hasta el momento, con un nivel adquisitivo medio-alto.
David, Elena y Silvia son unos recién llegados. No así Francisco Gil y David Barros, dos veteranos en el ecoturismo. El primero es fundador de la empresa Tumares es una sociedad creada a finales del año 1999 cuya principal actividad es el avistamiento de delfines y ballenas en el área del Estrecho de Gibraltar.
David Barros regenta Ornipark, un parque de Iniciación a la Ornitología, ubicado entre los parques naturales de Los Alcornocales y El Estrecho. “Vivimos en el mejor destino turístico para todo lo que sea naturaleza. En ningún lugar del mundo se ven las migraciones de aves como aquí y es que además tenemos patrimonio cultural que mostrar, tenemos una excelente gastronomía, una gente fantástica, acogedora. Esto es un lujo”, asegura este hombre que lleva 25 años dedicados al ecoturismo y uno de los máximos expertos en la ornitología.
Francisco Gil llegó a Tarifa en 1995 para practicar el buceo y se enamoró del lugar. Tanto que decidió instalarse aquí y montar una empresa que ya se vende sola. “Esto es una maravilla”, asegura. Cuando se le pregunta si el turismo de naturaleza está sobreexplotado en la comarca, Francisco Gil responde: “No, lo que está es mal explotado”.
Y es que tanto Gil como Barros aseguran que hay mucho por hacer. Aseguran que las Administraciones no ven las posibilidades de creación de riqueza que el ecoturismo ofrece y aplauden la iniciativa del Ayuntamiento de Algeciras de organizar este congreso. “Es la primera vez que se hace y hay que felicitarlo. Esto tenemos que repetirlo todos los años”, asegura Francisco Gil.
Una de las conclusiones que han salido del congreso es la necesidad de mejorar la colaboración y coordinación institucional, especialmente entre la administración turística y ambiental, y público-privada, definiendo una estrategia común y estableciendo las estructuras y cauces formales que lo permitan. Agregan que las administraciones han de contar con los empresarios para impulsar nuevos proyectos y para desarrollar iniciativas que apoyen el desarrollo de la iniciativa privada.
Entienden que la administración debe facilitar y apoyar a las empresas y emprendedores locales y no suponer un obstáculo más para su actividad. Así defienden la necesidad de mejorar la regulación de usos, que facilite el acceso al recurso en condiciones de sostenibilidad sin excesiva burocracia y con celeridad.
Otro reto es lograr una mayor colaboración entre los empresarios, que permita organizar y estructurar la oferta privada de ecoturismo, así como facilitar la cooperación público-privada. Para ello es necesario unirse en forma de asociaciones y trabajar por el interés colectivo. Es imprescindible, aseguran, parar la guerra de precios, y la competencia mal entendida, y cambiar a una política de calidad del servicio. Esta colaboración es además imprescindible para la creación de un verdadero producto de ecoturismo que agrupe diversos servicios y que puedan entrar en los canales de comercialización adecuados.
Además reivindican mejorar la promoción del destino con una estrategia común, en la que contribuyan distinto agentes y dónde la riqueza natural excepcional del territorio se utilice como un elemento diferenciador. Dicen que el papel de las administraciones turísticas responsables de la promoción es fundamental para apoyar e impulsar el ecoturismo en Cádiz y el Campo de Gibraltar.
Otra reclamación es que para poder posicionar el destino, se deben abandonar los localismos, individualismos y submarcas, y vender conjuntamente un destino: Campo de Gibraltar, Estrecho de Gibraltar y Cádiz.