La rápida actuación por parte de los Agentes de la Guardia Civil del Puesto Principal de Chiclana de la Frontera (Cádiz), impide que se consumara un suicidio por inhalación de gas butano y evita una posible explosión en una de las viviendas de la urbanización Real de la Barrosa sita en la localidad de Chiclana de la Frontera.
El suceso se produjo en una de las viviendas de la urbanización Real de la Barrosa sita en Chiclana de la Frontera (Cádiz)
Los hechos tuvieron lugar sobre las 20:40 horas del pasado día 14 de agosto de 2013. Tras recibir un aviso del servicio de urgencias 112, en el que alertaba de la llamada de un familiar de un posible suicida, la Central del Puesto Principal de la Guardia Civil de Chiclana de la Frontera alertó inmediatamente a una de las Patrullas de Servicio, la cual se dirigió a la urbanización Real de la Barrosa, a la vez que se le informaba de la existencia en el exterior del domicilio de una copia de la llave de la vivienda, dato aportado por el familiar informante y determinante para el feliz desenlace tras la brillante actuación de los Agentes.
Una vez personados los componentes de la Guardia Civil en el lugar, observan como la vivienda se encuentra totalmente cerrada, tanto ventanas como persianas así como la puerta de acceso a la misma, por lo que procedieron a inspeccionar los exteriores de la vivienda en busca de la llave mencionada. Una vez con el duplicado de la llave en su poder y tras realizar varias llamadas sin obtener respuesta desde el interior del domicilio y ante el peligro inminente de suicidio descrito por los servicios de emergencias, los intervinientes optaron por acceder al interior de la misma, encontrándose gran resistencia al abrir la puerta, ya que esta se encontraba atrancada desde el interior por una toalla de grandes dimensiones.
Al acceder al domicilio, percibieron un fortísimo olor a gas butano, por lo que rápidamente procedieron a la localización de la persona perjudicada, encontrándolo en la primera planta del domicilio, a la vez que cerraron las llaves de paso del gas, con objeto de evitar que siguiera aumentando la concentración de éste.
Los Agentes evacuaron al exterior de la vivienda al presunto suicida, siendo finalmente trasladado en una UVI MOVIL al Hospital Clínico de Puerto Real (Cádiz) donde quedó ingresado.
Debido a la situación de peligro extremo de explosión, los Agentes no dudaron en realizar la evacuación a un lugar seguro, de vecinos de las viviendas colindantes y un gran número de curiosos que se encontraban concentrados en el lugar. A su vez se personó una dotación del cuerpo de Bomberos que realizó medidas de concentración de gases tóxicos y procedió a la eliminación de los mismos.
Una vez finalizadas las operaciones de eliminación de gases tóxicos por parte de los bomberos, estos informaron a los Agentes de la Guardia Civil, que la concentración de gas había sido elevadísima y que hubiera bastado una simple chispa para provocar la explosión de las bombonas.
Con la realización de este brillante servicio ha quedado patente una vez más la gran profesionalidad de los componentes del Cuerpo de la Guardia Civil, arriesgando dos de sus agentes sus propias vidas para salvar la de un suicida, logrando evitar el fatal desenlace a la vez de una posible explosión por deflagración de gas butano que hubiera tenido unas mayores consecuencias.