Las diferencias mínimas son las que marcan los enfrentamientos entre los equipos grandes y ése ha sido el factor determinante en la contienda que han dirimido el Cajasur y el Borges, saldado con la victoria de la escuadra ilerdense para llevarse la edición 2022 de la Copa del Rey en Santander.
El cuadro catalán se ha impuesto por 2-3 al prieguense y eso ha supuesto el fin de una hegemonía que le había llevado a conquistar las dos últimas ediciones disputadas en Armilla y Antequera. De hecho, la final de esta tarde era una reedición de la anterior, si bien con un desenlace distinto.
Ambos conjuntos acudían a la cita después de apear en la ronda de semifinales al Arteal, en el caso de los cordobeses, y el Leka Enea, en el de los catalanes. En su contienda, el Cajasur se mostró sólido ante una gran escuadra compuesta por Silva, Mendes y Manhani, a quienes la tripleta formada por Carvalho, Caballero y Machado se impusieron por 3-0.
Y ésa misma formación fue por la que apostó Luis Calvo en la final. La única salvedad es que Machado abría partido ante Brodd y Caballero se quedaba para el punto intermedio. El prieguense tuvo un mal comienzo ante el sueco. Brodd comenzó fuerte y a Machado le costó cogerle el ritmo. Tanto es así que sólo pudo llevarse la tercera manga, mientras que la contundencia de Brodd fue mayor para llevarse el punto.
Después llegó un partido de altísimo nivel entre Durán y Carvalho. El portugués superó en cinco mangas al catalán, quien ha vivido unos días dulces en Santander con las consecuciones, además de la Copa de los títulos de España de individuales y dobles. Tal era su estado de gracia que hasta las acciones de fortuna le sonreían. Con todo, el luso sacó lo mejor de su repertorio para poner el 1-1.
El punto intermedio, siempre clave en los partidos de Copa, medía a Caballero y Masip. El jugador del Borges, bendecido en algunos momentos hasta por los cantos de la mesa, se llevó la dos primeras mangas. El del Cajasur respondió ganando con solvencia la tercera y la cuarta. Todo apuntaba a que esa inercia se podía mantener en la quinta y definitiva. Sin embargo, Joan Masip recuperó sensaciones y se impuso por 3-2.
Al Cajasur se le agotaba el margen de error. Carvalho, parecido al de la temporada anterior en Antequera, captó el mensaje y “sacó” de la mesa a Brodd con un 3-0 que invitaba a la esperanza de ver a Machado resolver, como sucedía otras tantas veces. Sin embargo, Marc Durán estuvo mejor en los momentos claves del quinto y definitivo punto. Machado respondió al 0-1 inicial, pero después el ilerdense resolvió la contienda en el cuarto juego. El Cajasur cedió la corona a un gran Borges.
