El Ayuntamiento de Baena (Córdoba) evitará que las familias pierdan su casa por desahucio hipotecario, ya que, según ha anunciado la alcaldesa de dicho municipio, María Jesús Serrano (PSOE), utilizará el presupuesto municipal para "rescatar a las personas" en un intento de que "nadie se lucre con los desahucios".
Según ha informado el Consistorio baenense, el objetivo de esta administración local es "plantar cara a los desahucios hipotecarios y, para ello, "el Consistorio no dudará en utilizar el dinero del presupuesto municipal para comprar las viviendas amenazadas, antes de la ejecución de la hipoteca, a fin de ofrecerlas, a continuación, a las propias familias en régimen de arrendamiento social, asegurando que con el tiempo dichas familias recuperarán la titularidad de la propiedad".
Esta la fórmula que ha sido elegida por el Pleno del Ayuntamiento de Baena, que preside la socialista María Jesús Serrano, que, con los votos a favor del PSOE e IU y la abstención del PP, ha aprobado una moción presentada desde la Alcaldía, a propuesta de diversos colectivos del municipio (UGT, Uneba, Apromuba, Asociación de Mujeres 'Ahora o nunca', Ecologistas en Acción, Tracdeba Y Asociación Mari Tienda).
En su redacción, la moción carga contra "las cláusulas abusivas de las entidades financieras", lo que unido a la crisis económica general está llevando a algunas familias a "la pérdida de su vivienda habitual".
El mecanismo de defensa diseñado por el Ayuntamiento para evitar los desahucios arranca con la puesta en conocimiento del caso por la familia afectada. En un primer momento será la oficina contra los desahucios de la Junta de Andalucía la que aborde la cuestión, en base al convenio firmado entre el Ayuntamiento baenense y la Consejería de Vivienda. Si el problema no encontrase solución en esta instancia, la Administración local asumiría el control.
Inicialmente, los contactos entre Ayuntamiento y entidades bancarias se encaminarían hacia el cumplimiento del Real Decreto-ley 6/2012, de 9 de marzo, de medidas urgentes de protección de deudores hipotecarios sin recursos. En caso de que la refinanciación de la deuda fuera inviable y la amenaza de ejecución de la hipoteca siguiera adelante, el Ayuntamiento aplicaría una última medida: la compra del inmueble con el remate hipotecario y el ofrecimiento a la familia de un alquiler social, con derecho a compra.
Lógicamente, la cuantía y el plazo del arrendamiento variarían según el precio de la deuda y los ingresos de la unidad familiar. Esta fórmula impedirá que la familia abandone su vivienda, cuya titularidad recuperará con el tiempo.
En su funcionamiento interno, esta fórmula supone para el Consistorio la creación de un fondo municipal de inversión que no parte con una asignación presupuestaria de salida.
El gobierno local del PSOE recurrirá a cuantas modificaciones de crédito sean necesarias, en función de los casos que vayan apareciendo, dada la imposibilidad de cifrar los gastos (por la adquisición) y los ingresos (por el arrendamiento) con antelación.
La aprobación de esta moción ha venido precedida de un estudio del estado de las hipotecas suscritas en Baena. Hasta el momento, las entidades bancarias solo han ejecutado la garantía hipotecaria en segundas viviendas e inmuebles industriales, sin necesidad de desahucio. Sin embargo, el análisis de los procedimientos de embargo abiertos prevé que lleguen al juzgado de Baena entre cuatro o cinco desahucios durante este año. De media, la deuda en estos casos ronda los 60.000 euros.
La alcaldesa de Baena, María Jesús Serrano, asume que la herramienta que pone en marcha su Ayuntamiento es pionera a nivel nacional y entiende que es el momento de "estar al lado de las familias" que, por culpa de la crisis, se enfrentan a un proceso de pérdida de su vivienda habitual. "El drama social" que hay detrás de cada desahucio simboliza "la injusticia" de esta crisis, donde "nos acostumbramos a que pierda el que menos lo merece", según ha señalado la alcaldesa socialista.
En ese sentido, Serrano considera "inadmisible" la práctica del negocio económico encubierto que se practica con los desahucios. Son los llamados "fondos buitre, manejados por los especuladores del sufrimiento ajeno", que siempre surgen en el último minuto para sellar un contrato de compraventa con el banco.
La regidora se muestra confiada en que "las medidas acordadas evitarán que las familias baenenses pierdan su casa o piso habitual y además restringirán las opciones de lucro que se dan en cada desahucio", ya que, según ha subrayado, "es hora de rescatar a las personas, a las familias, y no de pensar tanto en los bancos".
Aunque esta ayuda para las familias baenenses ya está en vigor, María Jesús Serrano ha aclarado que aún no se ha puesto en práctica, lo que la ha llevado a desear que "ojalá nunca lleguemos a aplicar estas medidas, pero si se han aprobado será para usarlas cuando sean necesarias y siempre con el máximo rigor", insistiendo la alcaldesa en que "se ha estudiado previamente la situación de Baena y sabemos dónde pisamos", de modo que "si hemos apostado por estos mecanismos de ayuda para nuestros vecinos es porque sabemos de la solvencia de nuestro ayuntamiento".
