Tras una semana de encierro de siete de los nueve miembros que integran el comité de empresa de Enresa en El Cabril, dichos representantes de los trabajadores han decidido abandonar esta medida de presión, inscrita en el proceso de negociación del convenio colectivo de los trabajadores de dicha instalación, ubicada en Hornachuelos (Córdoba), tras ser convocados por la empresa a una nueva reunión, el próximo miércoles.
Así lo ha destacado, en declaraciones a Europa Press, el presidente del comité de empresa, José Antonio Miranda (UGT), quien ha explicado que han desconvocado el encierro, aunque mantienen las reivindicaciones que les llevaron al mismo, para mostrar su "disposición" a la negociación a la que han sido "convocados por la empresa al más alto nivel", en un encuentro previsto en la sede central de la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) en Madrid.
El encierro, ahora concluido, según destacó en su momento el comité de empresa, ha tenido "el respaldo de la mayoría" de los 126 trabajadores de El Cabril, aunque no ha contado, en cambio, con la presencia de dos miembros del comité de empresa, "porque son dos de los jefes de servicio que se han visto beneficiados con un incremento del ocho por ciento a partir de 2012".
De hecho esta ha sido la principal razón de la movilización del comité de empresa, protestar ante el hecho de que "la dirección de Enresa ocultó subidas salariales para un colectivo de jefes, lesionando los acuerdos del convenio y la buena fe en la negociación" del mismo.
A esto se suma, según ha informado ya el propio comité, que Enresa "estafó a sus trabajadores en la venta del premio de jubilación" y, por todo ello, el comité de empresa de El Cabril inició el pasado 14 de mayo el encierro indefinido, que ahora ha suspendido, a la espera de los resultados de la negociación que se retomará el próximo miércoles, después del intento fallido del lunes de esta semana, cuando ya hubo una reunión entre ambas partes, pero sin que se cerrara ningún acuerdo.