El alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, ha destacado este lunes que era "previsible" que afloraran restos arqueológicos en el solar en el que se construye la Biblioteca Pública del Estado, en la capital cordobesa, a lo que añade que "había un cálculo de desfase en la obra ante la previsión de que existiera algún tipo de resto, pero desde el Ministerio de Cultura dicen que el retraso va a ser mínimo".
En declaraciones a los periodistas, el alcalde manifiesta que al poner en marcha "una actuación importante" que exige "tener que ir a cotas de subsuelo importante aparecen restos", si bien apunta que "cuando termine la fase de incorporación e integración de los restos al conjunto del edificio se van a poder recuperar posteriormente en las siguientes fases de obra".
Mientras, Nieto subraya que "hay un compromiso del Ministerio de Cultura para que el presupuesto previsto para el año que viene se podría incrementar para dar un mayor ritmo a la obra", algo que el alcalde "agradecería" para que la Biblioteca esté "cuanto antes al servicio de los ciudadanos y tener un gran equipamiento cultural de primer nivel".
Por tanto, tras la aparición de los restos, indica que hay que "tener paciencia y respeto con la historia y el patrimonio de la ciudad", al tiempo que comenta que es "un hecho que no sorprende ya en Córdoba y que habitualmente encontramos en cualquier obra que se haga de cierto calado".
En concreto, los trabajos de movimiento de tierras del solar en el que se construye la nueva sede de la Biblioteca Pública del Estado han desenterrado algunos restos en "muy mal" estado de conservación, si bien hasta mediados de enero se han descubierto unas 20 tumbas que de forma preliminar, aún no se había hecho un estudio del material encontrado, se estima que son de los siglos I y II d.C., al tiempo que se ha localizado en otra zona del solar restos de construcciones árabes, que habrá que también excavar y datar.
Así lo han confirmado a Europa Press fuentes del Ministerio de Cultura, que detallan que en el caso de las tumbas ahora se procede a "la detección de los enterramientos y a la limpieza de las cubiertas", dado que "antes de excavarlos hay que hacer un levantamiento topográfico y planimétrico de su situación". Una vez localizado todo el área de enterramientos se procederá a la excavación de los individuos y su posterior extracción.
Según los arqueólogos contratados, "no se trata de yacimientos de gran interés, ni en el caso de los restos romanos ni en el de las nuevas estructuras árabes". No obstante, destacan que serán los servicios competentes de la Junta de Andalucía los que tomen la decisión sobre cuál será su destino final.
Entretanto, desde el departamento de Cultura indican que "como el plazo de ejecución de la obra principal ya contempló la posibilidad de emplear los primeros meses de obra en los trabajos arqueológicos, todavía no hay necesidad de plantearse cambios en la estimación de la finalización de ésta".
INVERSIÓN DE MÁS DE 10 MILLONES
Las obras comenzaron a principios del mes de diciembre de 2014, después de que visitaran la zona los arquitectos y la arqueóloga para la ejecución del proyecto, que cuenta con un plazo de ejecución de 42 meses, de manera que la fecha prevista de final de obra es abril de 2018.
Al respecto, el proyecto, promovido por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte a través de la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos, cuenta con una inversión prevista de 10.544.634 euros. La nueva biblioteca tendrá una superficie total construida de 7.193 metros cuadrados y superficie útil de casi 6.500 metros cuadrados.