El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, ha apoyado este jueves crear un órgano de regulación de usos de la Mezquita de Córdoba sin "tocar" la titularidad del conjunto monumental con la Catedral, en manos de la Iglesia Católica, y espera abordarlo con la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE), y la Iglesia con "concordia y mediación".
En declaraciones a los periodistas, ha manifestado que dicho órgano o fundación estará para "la gestión del uso y disfrute de lo que acontece respecto de la Mezquita", de manera que "la Iglesia Católica tiene su liturgia y gestión autónoma y propia", algo que "nadie lo discute", ha remarcado.
En su opinión, la Mezquita "debe tener una regulación de un órgano de la sociedad civil y de los expertos para que su disfrute sea pacífico y redunde en beneficio de la ciudad", después de recibir la solicitud de distintos colectivos con más de 100.000 firmas para la gestión compartida.
Maetzu ha explicado que "con independencia del tema de la titularidad, que al Defensor del Pueblo no le corresponde, se proponía que la gestión de uso y disfrute de la Mezquita estuviera en un órgano, una fundación o un patronato", para lo cual ha puesto el ejemplo de la Alhambra de Granada, de cara a "regular un poco los eventos que se producen".
Todo ello "con independencia del natural derecho de la liturgia en la Catedral por la Iglesia Católica", de modo que "son dos templos con distintas significaciones", ha indicado, para defender "el respeto al legado y cultura que representa la Mezquita y también al que aporta la Iglesia".
A juicio del Defensor del Pueblo Andaluz, "unir los dos con la misma liturgia y regulación sería absurdo, porque son dos templos unidos, pero con una proyección cultural muy distinta y un respeto grande", a lo que ha agregado que "en esa concordia mucha gente estaría de acuerdo".
Al respecto, ha dicho que "se analizan los últimos eventos presentados con fotografías de un uso y una invasión de algunos símbolos que a lo mejor no serían propicios en el lugar de la Mezquita", al tiempo que ha subrayado que "las dos regulaciones tienen que convivir juntas y respetarse, pero que no haya invasiones y conflictos en esta línea".
En cuanto a la queja de la Plataforma Mezquita-Catedral de Córdoba Patrimonio de Todos sobre la instalación de los palcos y sillas de la carrera oficial de Semana Santa junto a los muros del conjunto monumental, Maetzu ha comentado que ha llegado en los últimos días y aún no tiene el análisis.
