La zona de derrumbe de la muralla romana en la calle San Fernando de Córdoba ya está cercada desde este jueves con una valla de seguridad anclada al suelo, tal y como anunciaron este miércoles el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) del Ayuntamiento de Córdoba, Salvador Fuentes, y la delegada de Fomento, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta en Córdoba, Cristina Casanueva.
Ello ha permitido, según ha informado la Junta, que comiencen este mismo jueves los trabajos de demolición controlada y retirada de aquellos elementos que presentan mayor inestabilidad, tanto del muro moderno que colapsó y que provocó este pasado martes el derrumbe parcial de la muralla, como de los propios sillares de ésta, que, junto a los ya precipitados y recuperados, se emplearán en la posterior restauración del lienzo de la histórica muralla.
Como consecuencia del derrumbe, la muralla romana ha perdido unos 70 centímetros de sus cerca de dos metros de espesor en un tramo de unos ocho metros, tras haber colapsado el muro moderno del solar que, en el lado de la calle San Fernando, servía en la práctica de sujeción de la histórica muralla.
Por este motivo ahora, una vez levantada la citada valla de seguridad, se procede, como si se tratara de una excavación arqueológica, a retirar los elementos, tanto del muro moderno, como sillares de la muralla romana que presentan una situación más inestable, para asegurar luego el conjunto y proceder después a la restauración de la muralla, corriendo todo ello a cargo de los dueños del solar de la calle San Fernando y del inmueble situado al otro lado de la muralla, aunque la ejecución de los trabajos será dirigida por la Junta en coordinación con la GMU.
De hecho, lo ideal, según opinan los técnicos de la GMU, es que se construya alguna edificación en el solar en cuestión, para así garantizar que sigue en pie este tramo de muralla romana, que, a lo largo de un kilómetro, recorre las calles Alfaros y San Fernando integrada en edificaciones modernas, incluido también el propio Ayuntamiento, en la intermedia calle Capitulares, donde una parte de la muralla es visible junto al Templo Romano.