Mientras el futuro institucional del Betis cuenta las horas para ser dilucidado, en el plano deportivo, el equipo de las trece barras volvió a demostrar una jornada más que jugar con un jugador menos, aunque pueda parecer increíble, a veces resulta eficaz.
Y es que el conjunto de Mel se erigió en Valencia como un bloque difícil de desestabilizar durante el tiempo que tuvo que estar con diez futbolistas e incluso con la posesión y el dominio del juego en muchas fases de la primera parte, en la que sí batalló sobre el terreno de juego de Mestalla en igualdad numérica.
No obstante, los resultados positivos de estas dos últimas semanas han llegado con los verdiblancos en inferioridad de elementos con respecto al adversario, pues ante la Real Sociedad como local y contra el Valencia a domicilio, el bagaje de puntos ha sido de cuatro de seis posibles.
Una realidad que choca en relación a la de los dos duelos iniciales, más complicados si cabe que los dos citados anteriormente,pero en los que los heliopolitanos no registraron expulsión alguna. Un empate ante el Villarreal y una dolorosa derrota frente al Real Madrid, fue el bagaje de puntos obtenido.
Calibrar la puntuación con el equilibrio inicial, es ahora la principal inquietud de Mel en próximos envites.
Recuperando efectivos
A Vargas, quien comenzó en solitario realizando en la sesión de este domingo carrera continua, se le unió Piccini y Digard. Por otro lado, Portillo causó baja por un esguince.
