Un consorcio chino ha acordado la compra inicial del 70 por ciento del AC Milan, y mantendrá a Silvio Berlusconi como presidente del club durante los primeros años, según dijo una fuente cercana a la operación al diario oficial China Daily.
La noticia, que aparece hoy en el periódico oficial chino y no ha sido confirmada por fuentes oficiales, añade que Berlusconi se quedaría durante los primeros dos o tres años, hasta que el 30 por ciento restante sea también adquirido por el consorcio chino.
No obstante, añade que esa cláusula está todavía siendo negociada, al igual que la estructura financiera del club y su gestión.
"Si todo va como está planeado, se podría llegar a un acuerdo final entre el 15 y 20 de junio", dijo la fuente citada por el China Daily.
Si bien la cifra de compra no ha sido revelada, la prensa italiana indicó los pasados días que la suma final (suponiendo que adquiere el 100% del club) podría rondar los 700 millones de euros (unos 782 millones de dólares).
Algunos medios italianos también se hicieron eco de que las negociaciones en China entre Suning Commerce Group y representantes del Inter de Milán son "positivas", pero no dieron más detalles.
La posible compra del equipo italiano por parte de un grupo chino engrosaría la creciente lista de empresas de las segunda economía mundial detrás de clubes europeos en el pasado año y medio.
A mediados de mayo, el hasta entonces dueño del Aston Villa, recién descendido a la Championship, confirmó la venta del club inglés al consorcio chino Recon Group, propiedad del empresario Tony Jiantong Xia, por entre 60 y 70 millones de libras (78 y 104 millones de euros).
Poco antes, un consorcio formado por China Media Capital (CMC) y Citic Capital (una filial del conglomerado financiero estatal Citic) pagó 400 millones de dólares (376 millones de euros) por el 13 % del grupo propietario del Manchester City.
Por su parte, el gigante Wanda se hizo con un 20 % de las acciones del Atlético de Madrid en ese periodo; mientras que Rastar Group ha comprado el Espanyol de Barcelona.
El Gobierno chino está embarcado en un ambicioso plan de desarrollo del fútbol a largo plazo -en el que se anima a firmas nacionales a invertir en el sector dentro o fuera del país- con el objetivo expreso de que su selección nacional sea una de las mejores del mundo hacia mediados de este siglo.
