El alcalde de El Puerto de Santa María, Germán Beardo, junto al teniente de alcalde de Fiestas, David Calleja, acompañó este sábado a la
Hermandad del Rocío de El Puerto en su reencuentro y
presentación con la Blanca Paloma en la aldea de Almonte, a la que volvían con su
gente llenos de emoción y sentimientos tras una espera obligada, que se ha hecho demasiado larga pero que por fin ha llegado tras tres primaveras, pudiendo compartir con los suyos con máximo orgullo una de las tradiciones de mayor arraigo y devoción de nuestra tierra, que celebra la vuelta a la normalidad.
El primer edil y David Calleja caminaron con el simpecado de El Puerto junto a los
romeros de El Puerto, guiados por Gonzalo Ganaza, hermano mayor y los sacerdotes
Juan Félix Ruiz Lama, director espiritual de la hermandad, y
Juan Franco, capellán de Camino, para ser recibidos como marca la tradición por la junta de gobierno de la Hermandad Matriz de Almonte. La salve rociera en su letra “al rocío yo quiero volver, a cantarle a la Virgen con Fe" ha cobrado el mayor sentido este año de vuelta y reencuentro que se recordará siempre.