El caso de Ciudadanos en El Puerto requiere de una profunda reflexión en cuanto a los actos que suele acompañar de un tiempo a esta parte a dicha formación. Descabezada y sin que nadie salga a poner orden en un partido ausente, su sangría no cesa.
Paradójicamente en otras elecciones locales, conocer, dar con la persona que encarnará la responsabilidad de comandar el partido -a tenor de las últimas elecciones andaluzas fue el más votado y uno de las poblaciones gaditanas con más tirón en el voto naranja-, se antoja complejo.
En 2015, recuerdan, a pesar de ser Silvia Gómez la candidata elegida, su rostro fue un trabajo arduo de encontrar en las siglas del partido. En su lugar era Albert Rivera, su presidente nacional, el que parecía se presentaba a dichos comicios locales. Casi cuatro años después, la historia se repite y a dos meses para que se celebren las elecciones locales, ni se conoce quién liderará la formación ni quienes acompañarán a éste, ni existe un patrón a seguir.
La transición de Cs sigue aún en proyecto y sin terminarse de ejecutar.
Sus vínculos con el extinto Independientes Portuenses continúan siendo más que evidentes. Como también los vaivenes y las múltiples deserciones que ha ido lastrando a una formación con abandonos, dimisiones, ausencias o concejal estéril, como en el que se ha convertido Javier Cuvillo, que de pasar a ser un posible sustituto, se ha convertido a estar desapercibido por sus pronunciamientos y mutismo en esta legislatura.
En su discreción estaría la justificación de no ser el elegido para tomar el testigo, por lo que su inacción estaría exculpado en la decisión trasladada de las altas esferas. Mientras ésta se lo piensa, Cs El Puerto está
missing, desaparecido y sin dar señales de vida. Y a todo esto cuando su papel -sobre la teoría- predominante ante unas elecciones locales y abiertas deben ser activa y fuerte.
Gómez dijo por activa y por pasiva que no sería ella la que continuara al frente, por más que las voces de sirena han llamado a su puerta en no pocas ocasiones. La idea que ha tomado forma sería la de continuar con una mujer al frente, sea simpatizante o independiente, pero eso sí, con una imagen femenina. Nadie lo desmiente ni lo confirma.
El tiempo pasa y al igual que las dudas, las conjeturas se abren paso ante la falta de noticias. La indefinición nacional refleja la incomodidad con la que se mueven a día de hoy a nivel local. Lo sucedido reciente en el Consistorio de Cádiz da buena muestra de que los tiempos nacionales y locales no son los mismos.
Lejos quedan las elecciones andaluzas que sirvieron de coartada ante el retraso. Vendrán las generales y luego el sprint final para las locales y el silencio se impone en Ciudadanos.