David De la Encina “en una vuelta de tuerca más en su campaña de juego sucio, se ha sacado hoy de la manga una denuncia falsa contra Germán Beardo y otros consejeros de la empresa municipal Impulsa, en un intento desesperado por conservar la Alcaldía, ya que ve el peligro de que los portuenses lo echen el domingo por su mala gestión y se tenga que buscar otra ciudad a la que arruinar”.
Ve el peligro de que los portuenses lo echen el domingo por su mala gestión y se tenga que buscar otra ciudad a la que arruinar“Los hechos que pretende denunciar De la Encina se remontan a 2013 y son la venta de los antiguos terrenos de Visteón a Plasticur. Una operación que se hizo con total transparencia, con tasaciones oficiales y el visto bueno previo de los órganos municipales. Nunca una operación en El Puerto se ha hecho con tantas garantías. La operación se aprobó en Pleno, contando previamente con la participación de Junta de Andalucía y la agencia IDEA y el acuerdo de los ex trabajadores de Visteon y, por supuesto no hay ni el más mínimo indicio de tráfico de influencias o aprovechamiento de ningún consejero”.
Tal y como anuncia Beardo “hay que tener en cuenta que una parte de los terrenos son todavía municipales y los otros se pueden recuperar porque había cláusulas de reversión que De la Encina no ha usado en estos cuatro años. Tampoco ha hecho nada desde mayo 2016 en que Impulsa acordó emprender acciones legales contra Plasticur, en lugar de hacer eso, como era su obligación, se dedica a inventar infundios contra su adversarios políticos en unas elecciones que da por pérdidas”.
De la Encina “lanza esta cortina de humo ahora, al final de la campaña, porque sabe que es una denuncia absurda que no va a ninguna parte y sólo muestra su desesperación porque los portuenses han descubierto su afición a hacer trampas, una vez que se supo que pidió no ir a trabajar a su puesto en la Junta durante siete meses para dedicarse a la política y haber utilizado los medios municipales que son de todos para hacer su campaña particular en estas elecciones anunciando realizaciones inexistentes o en falso como la inauguración de una biblioteca sin terminar”.
Germán Beardo ha declarado que está absolutamente tranquilo ante esta denuncia falsa: “Es una estratagema demasiado burda como para engañar a los portuenses que lo que se merece es un alcalde honesto, no un tahúr de cartas marcadas y sobre todo que sepa y quiera gestionar los problemas de los portuenses y traer las soluciones que la ciudad necesita”.