"Creo que está en tiempo de descuento. Su credibilidad puede quedar seriamente dañada si esto no se pone en marcha"
El líder del PSC, Salvador Illa, ha advertido al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, de que su "credibilidad" corre el riesgo de quedar "irremediablemente dañada" si no activa la mesa de partidos catalanes que pactaron los socialistas y ERC en el marco de la investidura de Pedro Sánchez.
"Creo que está en tiempo de descuento. Su credibilidad puede quedar seriamente dañada si esto no se pone en marcha", ha sostenido el jefe de la oposición en Cataluña en una entrevista con Efe.
El exministro de Sanidad ha destacado que él formó parte de la delegación socialista que negoció con ERC la investidura de Sánchez y que acordó activar un proceso de diálogo "con tres patas": la Comisión Bilateral Estado-Generalitat, la mesa de diálogo entre gobiernos y una mesa de partidos catalanes.
Tanto la Comisión Bilateral como la mesa de diálogo, ha recordado, se han reunido desde que Aragonès es presidente de la Generalitat, pero no ha pasado lo mismo con la mesa catalana.
Desde su punto de vista, cumbres como las que el president ha convocado con los grupos parlamentarios catalanes -todos excepto Vox- para abordar las medidas a tomar ante la crisis social y económica derivada de la guerra en Ucrania son positivas, pero no equivalen al espacio de diálogo político que reclama el PSC.
Para el primer secretario del PSC, es imprescindible que "se llame a las cosas por su nombre" y que se estructure una mesa de partidos que se reúna regularmente y debata de forma "serena y pausada" sobre cuestiones como la necesidad de incrementar el uso social del catalán o la relación entre Cataluña y España.
"Se puede decir que la mesa entre gobiernos se ha reunido poco, pero por lo menos se ha reunido", ha sentenciado el dirigente socialista, que ha rehusado opinar sobre cuándo debería ser el próximo encuentro de este espacio de negociación.
Aunque aún no haya fecha para una cita que estaba prevista para "principios de año", Illa ha negado que el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos haya metido en un cajón la carpeta catalana, si bien ha admitido que la atención ahora está centrada en la crisis provocada por la invasión rusa en Ucrania.
El líder del PSC ha destacado que también la ciudadanía ha desviado su foco de atención: según el último barómetro del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat, las principales preocupaciones de los catalanes son el paro, la inflación y el funcionamiento de la economía.
Sobre el conflicto catalán, Illa ha reivindicado que el único camino posible para encauzarlo es el diálogo y ha avisado de que las formaciones o dirigentes políticos que se alejen de él "se estarán apartando de Cataluña".
Siguiendo esta lógica, ha deseado que a JxCat "le vaya bien" en su congreso previsto para junio y julio y que la pugna interna entre las distintas familias se dirima a favor de las tesis más pragmáticas.
"Es bueno para Cataluña que haya un proceso esclarecedor", ha resuelto Illa, que ha expresado su "máximo respeto" hacia la formación que preside Carles Puigdemont.
Sea cual sea el desenlace del cónclave, se ha mostrado convencido de que el PSC y Junts seguirán llegando a acuerdos en ayuntamientos y entidades supramunicipales tras las elecciones locales de 2023: "Nosotros siempre estamos dispuestos a hablar con todo el mundo".
Y ha lanzado un mensaje dirigido al expresidente de la Generalitat Quim Torra, que sigue abogando por la unilateralidad: "Hay que ser muy prudente a la hora de dar recetas y consejos, cuando en el tiempo en que tú gobernabas no has hecho nada de esto".