La cantante de I dreamed a dream no gana para sustos: después de sufrir un ataque de nervios y montar un escándalo en un aeropuerto londinense, ahora se ha encontrado con que un intruso entró en su casa mientras ella se encontraba trabajando.
Susan regresaba a casa este martes después de haber estado grabando Everybody Hurts, una versión de REM para un disco que pretende recaudar fondos para las víctimas del terremoto de Haití. Fue al abrir su vivienda cuando sorprendió al extraño, quien se las arregló para salir de la casa por la misma puerta por la que Susan intentaba entrar.
Según han declarado fuentes policiales a la revista People: "Nos llamaron desde una dirección de Blackburn a las diez menos diez de la noche avisando de un disturbio. Como consecuencia de ello, un hombre fue detenido y más tarde liberado sin imputarle ningún cargo".
Por ahora habrá que esperar para ver quién se coló en casa de Susan y qué pretendía, aunque ésta no parece muy preocupada. La cantante tiene pensado seguir viviendo en su misma casa de siempre, una vivienda de protección oficial a la que no ha renunciado pese a la gran cantidad de dinero que ha ganado con su éxito musical.
