En un comunicado enviado a los medios de comunicación desde el exilio en Dubai, Shinawatra pidió al frente de los camisas rojas que se alejen “del terrible abismo e inicien conversaciones para acabar con la violencia política”.
Shinawatra, depuesto por los militares en el golpe de estado perpetrado en 2006, indicó que el diálogo entre las dos partes debe ser “genuino y sincero”.
También Shinawatra, personaje idolatrado por muchos camisas rojas, señaló en su mensaje que “la acción del gobierno supone un deshonor para nuestra historia y debilitará para siempre las instituciones y la democracia”.
El mensaje del ex primer ministro fue difundido el mismo día en el que cabecillas del frente retomaron conversaciones con representantes del gobierno, después de condicionar el fin de su propuesta de negociar a un alto el fuego y el repliegue de las tropas.
Los soldados cercan a unos 3.000 manifestantes del frente que desde hace cinco semanas permanecen atrincherados en una céntrica zona comercial de Bangkok, la capital.
El rebelde Thaksin Shinawatra figura en la lista revelada por el Consejo Nacional de Seguridad en el que aparecen los nombres de las 13 empresas y 93 individuos que financian la protesta de los camisas rojas.