La comisión de Peticiones del Parlamento Europeo (PE) aprobó ayer de forma definitiva su informe sobre la contaminación en la ría de Huelva, en el que pide un plan de rehabilitación de la zona y que las empresas responsables asuman los costes de la limpieza.
Los eurodiputados ya habían dado el visto bueno total al texto el pasado 1 de junio y ayer se limitaron a aprobarlo formalmente, con tres pequeñas modificaciones propuestas por Willy Meyer (IU). El PE quiere una descontaminación de la ría que mantenga “un estado conforme con toda la legislación europea vigente” y apuesta por el principio de “quien contamina paga”.