El presidente de Bolivia, Evo Morales, que tenía previsto asistir a la cumbre --según informaron la semana pasada fuentes del Gobierno español-- no acudirá finalmente a la cita y le sustituirá el vicepresidente Alvaro García Linera.
Aunque desde La Paz se liga su ausencia a una reciente operación de rodilla, la decisión de Morales se produce después de que se hayan publicado unos telegramas diplomáticos obtenidos por Wikileaks en los que funcionarios estadounidenses afirmaban que la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, cooperaría con EEUU en Bolivia, pero aconsejaba a Washington ser "cuidadoso" para que no pareciera una "operación política" contra Morales.
Los cables desvelados por Wikileaks también señalan que el ministro de Defensa brasileño, Nelson Jobim, comunicó en 2009 al entonces embajador estadounidense en Brasilia, Clifford Sobel, que Morales padecía un tumor en la nariz y que Brasil le había ofrecido recibir tratamiento médico en Sao Paulo, una información que el Gobierno boliviano ha desmentido.
España no se libra de revelaciones incómodas. Un cable enviado desde la legación estadounidense en Madrid en mayo de 2008 pone en boca del secretario general de la Presidencia del Gobierno español, Bernardino León, la afirmación de que las empresas españolas están "preocupadas por el tono populista" del Ejecutivo de Cristina Fernández, por la "polarización política" y por el "nivel de corrupción". A ultima hora del jueves, la delegación española no tenía cerrado el encuentro inicialmente previsto entre el Rey y Cristina Fernández.
Lo cierto es que desde los organizadores de la cumbre a alguno de los presidentes iberoamericanos, como el paraguayo Fernando Lugo, han reconocido que los líderes podrían abordar las filtraciones de Wikileaks durante su reunión en Mar del Plata. Fuentes de la Presidencia argentina citadas por el diario 'La Nación' aseguran que "será difícil abstraernos del caso Wikileaks, aunque intentemos mirar para otro lado".
Los encuentros bilaterales que los jefes de Estado y de Gobierno aprovechan para celebrar en el marco de la cumbre o el almuerzo más íntimo --conocido también como 'retiro'-- que mantienen desde 2007 sin la presencia de sus delegaciones será el marco previsible en que abordarán, si deciden hacerlo, las filtraciones, ya que este tema no figura en la agenda formal del encuentro.
El secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, ha admitido que las filtraciones de Wikileaks pueden aparecer "en los debates entre los presidentes" aunque no cree que este tema "complique las relaciones diplomáticas entre los países" y descarta en principio que los líderes hagan alusión a la cuestión en los documentos que se cierren en la cumbre.
FONDO PARA EDUCACIÓN
Al margen del interés mediático que suscitarán las eventuales conversaciones que los líderes tengan sobre las filtraciones de Wikileaks, la cumbre persigue crear un fondo solidario de más de 3.000 millones de euros para ayudar a los países más pobres de la comunidad a cumplir una serie de objetivos en educación en el horizonte de 2021.
El fondo se nutrirá principalmente de "donaciones" que hagan empresas e instituciones y se enmarca dentro de un plan educativo que la Comunidad Iberoamericana de Naciones prevé adoptar en la cumbre y por la que se comprometerá a invertir un total de 76.000 millones de euros en educación, siendo México y Brasil los que desembolsen un mayor presupuesto.
Entre otros objetivos, el plan aspira a "asegurar la escolarización de todos los niños en la educación primaria y en la secundaria básica en condiciones satisfactorias" y a que al menos en cada escuela haya un ordenador por cada 10 niños en el horizonte de 2021.
Guatemala, Nicaragua y El Salvador son los países que peores indicadores tienen en educación, mientras que Cuba es la nación con una menor tasa de analfabetismo en personas de 15 años o más (el 0,2 por ciento de la población), seguida por España, con un 2,1 por ciento.
Al margen del plan educativo, el contencioso que enfrenta a Costa Rica con Nicaragua por la soberanía de una porción de territorio en el Caribe es otro de los temas que se abordará en esta cumbre, ha avanzado Enrique Iglesias, que ha confiado en que la cita pueda servir para ir "pavimentando" un acuerdo. No obstante, el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, ha anunciado que no viajará a Mar del Plata. En su lugar acudirá la titular de la Corte Suprema, Alba Luz Ramos.
AUSENCIAS DESTACADAS
La Cumbre Iberoamericana de Mar del Plata se iba a recordar como el de la vuelta del presidente venezolano, Hugo Chávez, tras dos años de ausencia después de que el Rey le mandara callar públicamente en uno de los debates de la reunión de Santiago de Chile en 2007, lo que provocó una grave crisis diplomática entre los dos países.
Sin embargo, los medios de comunicación argentinos recogen que a última hora Chávez ha decidido no asistir a la cumbre y quedarse en su país con motivo de la emergencia decretada por las inundaciones, que ya han provocado más de 30 víctimas mortales en territorio venezolano.
Otras ausencias relevantes serán la del presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que ha cancelado su asistencia por las nuevas medidas económicas que se dispone a aprobar su Gobierno mañana para frenar el acoso de los mercados, y la del presidente de Honduras, Porfirio Lobo, al que Argentina, anfitriona de la cita, se ha negado a invitar.