Fernández admitió que la Zona Franca es una idea “en principio positiva” y que “puede ser buena, quién lo niega”, si bien lo ha considerado “una figura decimonónica”, respecto a una zona donde “más del 80 por ciento de las mercancías que circulan son comunitarias”, y donde, añadió, no existe demanda de empresas que operen con países terceros.
“De cerca de una treintena de establecimientos aduaneros en la provincia, 19 están en terreno portuario, por lo que creemos que hay una perfecta atención al respecto”, subrayó el presidente del Puerto, que incidió en que “en todos los años que llevo no he conocido ninguna empresa que no pueda pasar con otras fórmulas aduaneras ya existentes”.
El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, confirmó que Gobierno central y Ayuntamiento hispalense han retomado las conversaciones para la habilitación de la Zona Franca, señalando que confían en que a lo largo de 2012 “seamos capaces de haberla obtenido”.
De esta manera, la Zona Franca podría alcanzar una extensión superior a las 130 hectáreas, por encima de la que tiene Cádiz o la de Canarias. “Se trata de poner en valor una zona que necesitamos urgentemente dinamizar, pues es completamente absurdo que, con la inversión tan importante que se hizo para cambiar la esclusa, no se aproveche”, manifestó Zoido, en referencia a los beneficios tributarios.
Ya existen dos grupos de trabajo constituidos para determinar el espacio y las empresas y sectores que podrán tener cabida.
El Ayuntamiento sale a la defensa de la Zona Franca
El concejal de Empleo, Economía, Fiestas Mayores y Turismo, Gregorio Serrano aseguró ayer que “sólo un comisario político” diría que la Zona Franca no es positiva para la ciudad.