Según ha informado la Policía en un comunicado, la víctima pensaba que estaba realizando otro servicio más esa noche, pero cuando estaba a punto de llegar a la dirección indicada por el pasajero en la zona de Su Eminencia éste le agarró por la espalda y poniéndole una jeringuilla en el cuello le dijo que le diera todo el dinero o se la clavaría, infectada de SIDA.
El taxista intentó que se relajara, hablando con él y colaborando en todo momento. Así, instantes después, el delincuente aflojó la presión sobre su cuello y éste se zafó, se bajó del vehículo de manera precipitada. Sufrió en la maniobra la rotura de la chaqueta que vestía y el reloj que portaba durante el forcejeo.
Nada más apearse requirió la ayuda de las personas que circulaban en un automóvil que se dirigía hacia él, resultando ser un coche de la policía camuflado y sus ocupantes dos policías nacionales de paisano.
Instantes antes los agentes habían observado un taxi detenido y dos personas forcejando en su interior. Cuando iban hacia éste el conductor logró bajarse de manera precipitada, en una maniobra violenta, mientras el individuo que permanecía en el interior seguía amenazando con pincharle con una jeringuilla.
Tras identificarse como policías, detuvieron al agresor, quien inicialmente también amenazó con pincharles a ellos si le impedían la fuga.
El taxista les comentó que un compañero de profesión había sufrido un robo idéntico dos semanas antes por una persona de las mismas características físicas, por lo que la detención se amplió con una exhaustiva investigación posterior.
LA INVESTIGACIÓN
De este modo, los agentes recabaron del taxista cuanta información pudieron y tras realizar diversas pesquisas lograron la identificación de la persona que había sufrido un robo dos semanas antes y de un testigo. Estas personas no habían denunciado.
Tras tomarles declaración e informar de sus derechos como víctima al agredido, los policías realizaron el resto de diligencias necesarias, entre otras varias de identificación con resultado positivo, que permitieron el esclarecimiento de este otro ilícito desconocido hasta el momento de la detención, y la puesta a disposición judicial de F.T.C. como autor de ambos hechos una vez finalizado el atestado.
La detención fue practicada por agentes adscritos al Grupo Sombra de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana y la investigación por el Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Distrito Sur.