El empresario Gonzalo Pascual, fundador de Spanair, ha fallecido este jueves a los 69 años en su domicilio de Madrid como consecuencia de un infarto sobre las cuatro de la madrugada, según confirmaron a Europa Press en fuentes empresariales.
Pascual, nacido en Madrid el 18 de diciembre de 1942, fue presidente de varias compañías y fundador de otras tantas, entre ellas Spanair, Viajes Marsans y Trapsatur.
Los restos del empresario serán trasladados al tanatorio de Tres Cantos en Madrid, según confirmó su hijo Ignacio Pascual a Europa Press, para posteriormente ser enterrado mañana en el cementerio de La Almudena de la capital.
El hijo del empresario destacó que "el disgustó que tenía" su padre derivado de los problemas de Viajes Marsans durante los dos últimos años es "lo que se le ha llevado", tras "más de 50 años de trayectoria empresarial".
"Mi padre estaba peleando por intentar disminuir el daño causado y devolver el dinero, y seguiremos peleando por ello. Era un hombre honrado que luchó mucho, fundó muchas empresas y no tenía dinero", aseguró emocionado.
El nombre de Gonzalo Pascual ha estado siempre ligado al de otro conocido empresario, Gerardo Díaz Ferrán, el que fuera presidente de la CEOE, con el que se asoció en varias aventuras empresariales como las de Spanair y Viajes Marsans.
La quiebra de Air Comet, aerolínea del grupo turístico Marsans, que dejó unos 1.200 pasajeros afectados, arrastró a la 'joya de la corona' de la compañía Viajes Marsans, referente del sector turístico con más de cien años de historia.
DILATADA TRAYECTORIA.
Pascual, ingeniero industrial, fundó su primera compañía en 1964, dedicada a importaciones y exportaciones, y en 1967 la empresa Trapsa, ya junto con Díaz Ferrán, compañía dedicada al transporte de líneas de autobús en la provincia de Madrid, que extendió su actividad en toda España, y de la que fue vicepresidente y consejero delegado.
En el año 1971 fue elegido presidente del grupo urbano de viajeros de Madrid, cargo en el que fue reelegido hasta 1978 en el que fundó la Asociación Provincial de Transportes Colectivos Urbanos y Líneas de Viajeros de Madrid, que presidió.
En su dilatada trayectoria figuran entre otros cargos el de presidente de Spanair, Viajes Marsans, Trapsatur, Travel Bus, Publibus, consejero de Air Comet, consejero de Aerolíneas Argentinas --compañía que fue expropiada a Marsans--, y consejero de Club de Vacaciones.
Además, fue vicepresidente de Seguros Mercurio --empresa en concurso de acreedores--, vicepresidente de Pullmantur y Pullmantur Air, vicepresidente de Mundicolor, vicepresidente de AeBal (Aerolíneas de Baleares), vicepresidente de Hotetur (hotelera de Marsans), vicepresidente de Vie Viajes, vicepresidente de Autobuses Urbanos y consejero de Fasa Renault.
Pascual fue también vicepresidente de la CEOE, con Díaz Ferrán en la presidencia, presidente del Consejo de Turismo de la patronal, vicepresidente de la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (CEIM), vocal del pleno de la Cámara de Comercio de Madrid y miembro del Comité Ejecutivo de Ifema.
En 1989 le fue concedida la Medalla de Plata al Mérito Turístico y en febrero de 1996 la Medalla de Oro al Mérito Turístico.
LOS PROBLEMAS DE MARSANS.
Los problemas en Marsans comenzaron con la falta de liquidez, tras verse arrastrado el grupo por la quiebra de Air Comet. El 9 de junio de 2010, Pascual y Díaz Ferrán anunciaron la venta del grupo Viajes Marsans a la sociedad Posibilitum Business del empresario valenciano experto en quiebras Ángel de Cabo, a la que vez que presentaron la solicitud de concurso de acreedores de la compañía turística con una deuda de 183 millones de euros.
Los empresarios siempre han mantenido que el cierre de Viajes Marsans se debió a la retirada dos meses antes de la licencia para vender billetes por parte de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y a la falta de financiación bancaria derivada de la crisis económica.
Desde entonces, tanto los acreedores como el Ministerio Fiscal les demandaron junto a Posibilitum Business ante los juzgados mercantiles y la Audiencia Nacional por presunto vaciamiento patrimonial de la compañía turística. Los jueces dictaron el embargo de todas sus propiedades en varios procedimientos. La Audiencia Nacional les imputó por un presunto delito continuado de apropiación indebida por valor de 4,4 millones de euros procedentes del dinero de los clientes del grupo Marsans.
El Juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid está pendiente de resolver la declaración de culpabilidad de los empresarios y la sociedad compradora por la quiebra de Viajes Marsans, tras celebrar el juicio la pasada semana al que asistieron tanto Díaz Ferrán como Pascual.
El pasado mes de mayo el Juzgado de lo Mercantil número 9 de Madrid declaró a Díaz Ferrán y a Pascual, culpables de la quiebra de Seguros Mercurio y les impuso a ambos 15 años de inhabilitación para administrar bienes ajenos, así como el pago de 12,1 millones para cubrir las deudas de la aseguradora.