La Fiscalía Superior de Navarra está investigando si en el cobro de dietas en el Ayuntamiento de Pamplona se han cometido los delitos de cohecho, malversación y falsedad en documento oficial.
Quince ediles de Pamplona de todos los grupos municipales han cobrado a lo largo de la legislatura dietas por reuniones de grupo de las que no existen actas que reflejen la fecha de la reunión, el lugar o los asistentes, según informa Diario de Navarra.
Se da la circunstancia de que los ediles lograban cobrar siempre el máximo permitido por estas reuniones, un total de 18.720 euros al año.
La fiscalía ha solicitado por el momento los recibos de cobro de todos los concejales de Pamplona que han percibido dietas y que tienen que ser entregados al Cuerpo Nacional de Policía.
El fiscal también está analizando si la firma de la concejal de NaBai Uxue Barkos en dos recibos entregados en 2012 para el cobro de dietas es falsa. La edil ha señalado esta semana a los medios que los recibos que presentó están firmados por ella o con su "autorización".
Por su parte, a principios de mayo, el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, afirmó que tenía "la total y absoluta seguridad" de que "todo" el dinero cobrado por los ediles pamploneses por reuniones de grupo "ha sido por trabajo realizado" y presentó a los partidos un nuevo sistema de control de las dietas.
Este nuevo sistema es básicamente un modelo "en el cual conste nombre, firma, día, hora y lugar en el cuál se tienen las reuniones y que esas reuniones sean en sede municipal, normalmente en la Casa Consistorial que es donde los grupos se reúnen", detalló el alcalde.