La Unión Progresista de Fiscales (UPF) estudia denunciar los gestos fascistas de miembros y dirigentes de Nuevas Generaciones (NNGG) que han salido a la luz en los últimos días, para advertir de que el "auge" de estos comportamientos "no son una cosa trivial", según ha informado a Europa Press el presidente de esta organización, Álvaro García.
García, que ha explicado que la decisión la adoptará la comisión ejecutiva de UPF en su reunión a principios de septiembre, "ante la inactividad de aquellos a quienes corresponde", ha apuntado que se trata de una "acción simbólica" para denunciar el "auge" de este tipo de acciones en España.
En los últimos días se han publicado fotos de un dirigente de NNGG de Xátiva ante una cruz gamada y de otro de Gandía haciendo el saludo fascista, así como un mensaje de la cuenta de la organización juvenil de Bollullos (Huelva) en Twitter destacando que 'Franco ha muerto' es una frase que nunca debió existir.
A través de esta red social, UPF advierte de que los actos de apología nazi y fascista "son delictivos" y "deben ser perseguidos por la Fiscalía y debidamente sancionados".
Además, la UPF considera "intolerable" que se "justifiquen los actos de apología nazi como una broma" y lo tilda de "vomitivo".