El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha dejado claro este miércoles que su única opción del proceso soberanista para los próximos meses pasa por que los catalanes puedan votar en una consulta el 9 de noviembre.
"Sólo hay un plan", ha proclamado en la clausura de un acto oficial en Talamanca para recordar el 300 aniversario de la última batalla que ganaron los catalanes en la Guerra de Sucesión, en 1714.
Al día siguiente de que la vicepresidenta, Joana Ortega, abriese la puerta a posponer la consulta, Mas ha recalcado que mantiene intacta su hoja de ruta y que acordará cualquier decisión "importante" que afecte al proceso con el resto de partidos que apoyan la votación: ERC, ICV-EUiA y CUP.