Antonio María Álvarez-Buylla, decano del Colegio de Procuradores de Madrid, el jurista que sustituirá a Mercè Pigem como vocal del Consejo General del Poder Judicial después de la dimisión de ésta, está pendiente de que un juzgado de Madrid decida si archiva o no una causa en la que ha sido imputado.
Este jurista conservador fue propuesto por el PP y votado por el Senado como primer suplente en los nombramientos de esta cámara para el Poder Judicial por el turno de juristas y ahora que Pigem ha dimitido, una vez el presidente del CGPJ comunique la vacante a la cámara, será designado vocal del órgano de gobierno de los jueces.
La Asociación para la Defensa del Procurador acusó a Álvarez-Buylla, como decano del colegio, de una falsedad documental cometida en el estatuto profesional, pues alteró el texto del mismo, que fue publicado en el Boletín de la Comunidad de Madrid "con la alteración mendaz incorporada". El citado estatuto fue anulado y el acusado atribuyó el asunto a un error administrativo.
El juzgado archivó el asunto, pero la acusación recurrió ante la Audiencia de Madrid para que obligara al juzgado a llevar a cabo una serie de diligencias, entre ellas la declaración como imputado de Buylla. Así lo acordó la Audiencia y por ello desde entonces está imputado en la causa.
Una vez celebradas dichas diligencias ahora el juzgado deberá decidir si archiva o no el caso y lo ha hecho en un auto que está siendo notificado a lo largo de la mañana de hoy y cuyo sentido todavía no es conocido