Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización que utilizaba a mujeres de avanzada edad para introducir cocaína en España. Las mujeres, embarcándose en cruceros de lujo procedentes de Sudamérica, se hacían pasar por turistas para eludir los controles policiales. 

En el transcurso de la operación, han sido incautados 27 kilogramos de cocaína en el registro de uno de los camarotes en una escala realizada en Cádiz, donde iban a desembarcar la droga. En total, los agentes han detenido a nueve personas y han desmantelado también dos cultivos hidropónicos de marihuana en Barcelona. Además, el grupo se dedicaba perpetraba extorsiones, secuestros y sustraía partidas de estupefacientes a otros narcos.
Según informó la Policía en un comunicado, las investigaciones es iniciaron a mediados del verano pasado cuando se detectó la presencia de un grupo criminal asentado en Cataluña y que pretendía establecerse también en Ibiza para la distribución de cocaína en la isla.

alta especialización
La organización, perfectamente estructurada, estaba formada por distintas células independientes entre sí y dedicadas a distintos ilícitos. El grupo dedicado al narcotráfico introducían en España grandes cantidades de hachís para su posterior distribución a Europa, principalmente a Holanda, y cocaína con destino Cataluña e Ibiza.
Otra de las ramas estaba dirigida por un ciudadano holandés, encargado de dos laboratorios hidropónicos de cultivo de marihuana en diferentes localidades de Barcelona. La tercera célula perpetraba otras acciones mediante el uso de la violencia o la intimidación, entre ellas secuestros, robos de droga a otras organizaciones criminales y extorsiones por deudas de estupefacientes. 

Las pesquisas revelaron que la organización preparaba el traslado de un importante cargamento de cocaína procedente de Brasil, país al que se había desplazado uno de los cabecillas cuyas iniciales son F.J.P.G., para la negociación de una partida de droga cuyo destino final era Cataluña y Baleares. 

Para ello, contaban con personas de avanzada edad que se embarcarían en un crucero transoceánico de lujo para abastecerse de estupefacientes en las paradas en puertos brasileños. En algunos de ellos, esperaba F.J.P.G. y habría entregado la cocaína para que los 'correos' la introdujeran en el crucero sin levantar sospechas entre la tripulación, al hacerse pasar por simples turistas. Las mujeres, con la droga oculta en sus maletas, la entregarían a otro miembro de la red a su llegada a España. 

Los agentes lograron identificar a las dos personas a bordo del crucero y las vigilaron al objeto de determinar el momento en que desembarcarían el estupefaciente en España. El destino final era la ciudad de Málaga, aunque otros integrantes del grupo, C.I.S. y J.V.A.R., se habían trasladado a Cádiz para descargar la mercancía en una parada del trasatlántico, y así evitar la aprehensión de la droga en el caso de una eventual operación policial. En la primera fase del operativo, los policías arrestaron a cuatro personas: los dos 'correos' que viajaban en el crucero y los otros dos desplazados a Cádiz. Allí incautaron los 27 kilos.