El lehendakari, Iñigo Urkullu, cree que hay "grupúsculos" que se resisten a que el pasado de violencia y de su justificación "quede atrás", en alusión a la quema este pasado fin de semana que ocho autobuses en Derio, y ha insistido en pedir a la izquierda abertzale que los "aísle".

   En una entrevista concedida a la Cadena SER, recogida por Europa Press, Urkullu ha considerado que "no hay vuelta atrás en la violencia de ETA, pero es verdad que hay, probablemente, unos grupúsculos que se resisten a que el pasado de un ejercicio de violencia y de justificación de la violencia, quede atrás". "Parece que hay algún grupúsculo que sigue pensando que en el debate político todo vale y no es así partiendo de unos principios éticos", ha apuntado.

   El presidente del Gobierno vasco ha señalado que al sabotaje le da "importancia" y ha recordado que ha reclamado a la izquierda abertzale para que "deje aislados a esos grupúsculos que se amparan también en un discurso que hasta ahora haya podido ser de la izquierda abertzale".

   "Yo tengo la firme esperanza de que la izquierda abertzale está dando pasos, todavía tiene que dar muchos, pero espero que esto obedezca a un grupúsculo que debe quedar absolutamente aislado", ha apuntado.

DESARME DE ETA

   Iñigo Urkullu ha asegurado que, para que ETA se desarme, "falta su decisión". En este sentido, ha señalado que la banda tiene que anunciar su "desarme completo, verificable y rápido", y ha apuntado que, en este sentido, "está perdiendo el tiempo".

   Además, ha recordado que el 21 de diciembre del año pasado el Gobierno vasco presentó un plan de desarme ante "la inacción o renuencia del Ejecutivo español a un propósito de desarme por parte de una organización terrorista".

   "Es curioso, analizando los conflictos armados que hayan existido en el mundo, que, cuando una organización terrorista está dispuesta, después de haber anunciado el cese definitivo de su violencia, a plantear un desarme, no encuentre interlocutor", ha añadido.

   Urkullu ha indicado que ya planteó esto a Mariano Rajoy y, como Gobierno vasco, ha ofrecido su plan de desarme. Sin embargo, ha añadido que todo ello pasa porque "ETA anuncie el desarme definitivo, completo, verificable, rápido y urgente, y porque se pronuncie en un reconocimiento del daño injusto causado, y que todo ello lleva a su disolución".