El exconseller y diputado de JxCat Jordi Turull ha enviado una carta al presidente del Parlament, Roger Torrent, en la que le anuncia que retira su candidatura a la Presidencia de la Generalitat y apuesta porque el investido sea su compañero de grupo Jordi Sànchez.

En la misiva, recogida por Europa Press, recuerda que su situación de prisión preventiva supone un obstáculo para aspirar al cargo, lo que le obliga de "forma provisional" a renunciar a su investidura y apuesta porque su relevo sea el expresidente de la ANC y diputado de JxCat.

La carta de Turull se hace publica después de otra carta del expresidente Carles Puigdemont con la misma tesis: se autodescarta para la Presidencia y pide que el elegido para someterse a un debate de investidura sea Jordi Sànchez.

"INJUSTAMENTE RECLUIDO"

El exconseller recalca en su carta que la escribe desde la cárcel de Estremera (Madrid), donde está "injustamente recluido" junto con el exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras y los también exconsellers Joaquim Forn, Jordi Turull y Raül Romeva.

De la misma manera que Puigdemont, Turull alega que la reciente resolución del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas sobre Jordi Sànchez supone un aval para que este someta a un debate de investidura de la Cámara catalana.

Según Turull, la resolución apela al Estado para que "disponga de todas las garantías y mecanismos necesarios para que el diputado Jordi Sànchez pueda hacer valer sus derechos políticos y someterse al debate de investidura ante el pleno".

Considera que el pronunciamiento del Comité de Derechos Humanos ha puesto de manifiesto a nivel internacional "la falta de garantías políticas del Estado español y evidencia que los derechos políticos de las minorías son vulnerados por una justicia absolutamente politizada y al servicio del poder central".

Turull también quiere dejar constancia en su misiva que se siente "moralmente y políticamente" amparado por la misma resolución del Comité de Naciones Unidas, aunque esta no aluda explícitamente a él sino exclusivamente al diputado Jordi Sànchez.

INVESTIDURA FALLIDA

El Parlament intentó la investidura de Turull hace dos semanas pero resultó fallida: en la primera votación fue rechazado porque la CUP declinó dar su apoyo, mientras que la segunda votación no se pudo celebrar porque el exconseller fue de nuevo enviado a la cárcel.

Turull concluye que, ante esa situación, lo más recomendable es dejar su candidatura en suspenso y proceder a la de Jordi Sànchez: "Es una acto de justicia".