La secretaria de Igualdad del PSOE, Carmen Calvo, ha asegurado hoy que con la moción de censura contra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, los socialistas quieren "estabilizar" el país, conseguir una serie de objetivos sociales, hacer "limpieza" y convocar elecciones en "unos meses".
"Queremos gobernar solos, con una agenda social, un plazo corto, razonable de tiempo, y luego convocar elecciones", ha resumido Calvoen declaraciones a los medios en la sede madrileña del PSOE, donde ha hecho un llamamiento para que les apoyen todos los diputados con el mensaje de que "este país no aguanta un día más la corrupción del PP".
Calvo ha insistido en que la idea del líder socialista, Pedro Sánchez, es convocar elecciones en un periodo "corto", de tiempo, aunque, ante la insistencia de las preguntas de los periodistas, ha precisado después que ese plazo sería de "unos meses".
Según su criterio, no sería adecuado convocar inmediatamente elecciones en medio de la crisis política actual, sino que es preciso esperar un plazo "razonable" de tiempo hasta "estabilizar al país en sus muchas crisis y restañar desigualdades".
"Necesitaremos un plazo de tiempo razonable en términos de meses", ha puntualizado, antes de negar que el PSOE haya presentado esta moción de censura sólo porque Sánchez quiera llegar al poder "a toda costa", tal y como le acusaron ayer el propio Rajoy y varios dirigentes del PP.
A su juicio, esa ha sido "la respuesta más pobre que ha dado Rajoy en su vida, pobrísima política e intelectualmente hablando".
Si pusieron en marcha este mecanismo constitucional fue porque no quieren ser "cómplices" de la "indignidad" en la que, según Calvo, han metido a España el PP y Rajoy.
"Quien ha desestabilizado la política de este país, señor Rajoy, es usted, con un partido condenado y un rosario de sentencias (...) Quien está desestabilizando es el PP. Lo entiende todo el mundo menos ellos", le ha replicado.
A Ciudadanos, Calvo le ha recordado que la moción "instrumental" para convocar elecciones automáticamente "no existe" en la Carta Magna, donde sí se recoge la figura de moción de censura constructiva.
De hecho, Calvo ha explicado que el PSOE esperó 24 horas tras conocerse la sentencia del caso Gürtel a que Rajoy tomara la decisión "decente" de poner fin a la legislatura y que fue ante la falta de reacción del presidente del Gobierno cuando su partido presentó, "por responsabilidad", la moción de censura.
"Éste no era el escenario ideal, pero es el escenario donde por ética y por política tenemos que estar los socialistas", ha subrayado, con el argumento de que el PSOE pretende "salvar" así la "dignidad" de España después de que el partido gobernante haya sido "condenado" por "delitos gravísimos".
Junto a ese objetivo de "limpieza", Calvo ha abogado por "volver a la política", lo que ha traducido como el hecho de que se vuelva a hablar en el Parlamento de los problemas que preocupan a la gente, como la subida de los salarios, las pensiones, la igualdad o la educación.
Para ello, el PSOE propondrá un programa de gobierno con el que quiere recuperar "la normalidad, la tranquilidad y la estabilidad" y sobre el que tendrán que pronunciarse el resto de grupos políticos en el debate de la moción.
En este sentido, ha dejado en el aire si los socialistas tratarán de atraer a algún partido en concreto para sumar los votos necesarios y ha reconocido que no han mantenido ningún contacto ni con Ciudadanos ni con los independentistas catalanes.
Su propuesta "por la dignidad de este país", ha precisado, irá dirigida a los 350 diputados del Congreso, que serán los que tengan que posicionarse sobre si quieren un gobierno que dé respuestas desde la izquierda a los principales problemas del país, o si prefieren que siga gobernando "la derecha" condenada "por corrupción".
Los socialistas no barajan la posibilidad de retirar la moción, tal y como le ha pedido Cs, partido al que Calvo ha advertido: "Nosotros tenemos la elegante costumbre de no decirle a ningún partido lo que tiene que hacer (...) No aceptamos nunca que nos digan qué tenemos que hacer nosotros".
Ha tenido además palabras para los independentistas, después de que algunos dirigentes soberanistas hayan reclamado al PSOE que retire su apoyo al 155, y ha sido para avisar de que Pedro Sánchez "no se va a desdecir de nada".
Tampoco se va a desdecir, ha apostillado, de sus acusaciones de xenofobia a Quiem Torra, porque el nuevo presidente catalán "tiene publicado" su pensamiento.