El médico Manuel Salvador Román, que perdió a su mujer en el accidente del tren Alvia 04155, en el que murieron 81 personas el 24 de julio de 2013 en Santiago de Compostela, ha reclamado hoy "responsabilidades políticas" a la entonces ministra de Fomento, Ana Pastor (PP), y a su predecesor, el socialista José Blanco.
En su comparecencia en el Congreso ante la Comisión de Investigación del accidente, esta víctima ha demandado del nuevo titular de Fomento, José Luis Ábalos, "cariño, atención y que haga todo lo posible para que esto jamás vuelva a suceder".
Manuel Salvador Román ha ofrecido a la comisión un testimonio sobrecogedor del "infinito dolor" que le produjo la muerte de su "querida esposa Consuelo", que ese día viajaba sola "excepcionalmente" a Santiago para celebrar un aniversario de estudios con sus compañeras de carrera.
Tras explicar que, a su juicio, el accidente tuvo lugar por "errores de funcionamiento y de trazado, errores políticos, errores humanos y una serie de etc", ha dicho que le "duele" y le "indigna" pensar que todos esos errores fueron "evitables" y ha rogado "a todos los que tuvieron algo que ver, por negligencia o desinterés, que le pidan perdón" a él y a todas las víctimas.
En su opinión, fueron evitables los errores en la puesta en funcionamiento de la línea, los de las medidas de seguridad y los de valoración del riesgo de la curva de Androis en la que descarriló el tren.
También ha reclamado responsabilidades políticas "para que los afectados tengan el descanso que se merecen" y se ha mostrado convencido de que en este asunto "están implicados los dos ministros".
Ha sostenido que la responsabilidad de Blanco es que "vendió como un tren de Alta Velocidad algo que no era así", en respuesta al diputado del PSOE Odón Elorza, que ha recordado que José Blanco hizo el "viaje inaugural" del servicio, pero que a los pocos días ya no era ministro y no podía tomar decisiones".
"Se vendió algo que no era cierto, porque todo el mundo que entró allí pensaba que iba en un convoy con alta seguridad y se vendió como un tren de Alta Velocidad que parece ser que no era tal", ha argumentado Manuel Salvador Román.
Por su parte, el representante del PP, Celso Delgado, ha defendido lo "sensibilizada" y "extraordinariamente preocupada" que está la actual presidenta del Congreso, Ana Pastor, con este asunto y ha reivindicado que su partido tiene "el mismo interés que los demás en conocer la verdad".
El diputado 'popular' se ha disculpado con esta víctima y con todo aquel al que pudiera molestar por lo ocurrido en el acto que presidió Alberto Núñez Feijoo en el primer aniversario del accidente, si bien ha recalcado que "no nació de la afrenta, sino del corazón".
En su comparecencia, Manuel Salvador Román ha dicho que "quiere creer" que no ha habido interferencias políticas dentro de la causa judicial, pero ha asegurado que "no lo tiene claro" y que "parece que los peritos no han sido todo lo independientes que deberían".
Ha recordado que, aunque en un primer momento pareció que la responsabilidad era del maquinista, "cuando se conocen más datos, se ven muchas mas negligencias y muchas más cosas que deberían haber sido contemplados".
También ha confirmado que los afectados por este accidente se han sentido "más amparados en Europa que en España".
Manuel Salvador Román, que ha subrayado que, en su caso, el servicio que le ha prestado la Oficina de Atención a las Víctimas de Renfe ha sido "excelente", ha recibido muestras de apoyo y compresión de los representantes de Foro, ERC, Cs, En Marea, PSOE y PP, a los que ha respondido que salía "contento" y "satisfecho" por la "predisposición de todos" ellos.