Esquerra Republicana (ERC) ha amenazado este miércoles al Gobierno de Pedro Sánchez con no pactar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2019 si la fiscal general del Estado no retira la acusación del delito de rebelión contra los presos del 'procés'.
Así lo ha explicitado el diputado de ERC Joan Tardà en la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso, en la que ha interpelado al jefe del Gobierno, Pedro Sánchez. "Si usted no insta a la fiscal general del Estado a retirar la acusación de rebelión, ¿cómo será posible pactar los Presupuestos? Casi, casi, imposible", ha avisado Tardà, que ha pedido también la absolución de los presos del 'procés' por el resto de delitos.
Sánchez le ha recordado que el independentismo no tiene una mayoría social detrás para imponer al resto de la sociedad catalana sus aspiraciones de secesión, y mucho menos para hacerlo mediante un "quebramiento" de la ley.
MÁS DIÁLOGO Y RESPETO A LA LEY
"Respetemos la ley y encontremos cauces para poder fructificar ese diálogo que creo que necesitan tanto los catalanes nacionalistas como los no nacionalistas", ha instado Sánchez al independentismo como fórmula para superar la situación actual.
Pero a Tardà esta posición del presidente le ha parecido "un tanto hipócrita políticamente" en tanto en cuanto insta a la sociedad catalana a dialogar al tiempo que excluye, en opinión del diputado de ERC, a 2'4 millones de catalanes que en el referéndum del 1 de octubre de 2017 se autodeterminaron, según Tardà.
"Y la exclusión nunca puede ser solución", ha advertido el diputado independentista porque "nada se puede construir contra la voluntad de la mitad de los catalanes independentistas de la misma manera que nada se puede construir contra la voluntad de la mitad de los catalanes que no lo son".
LA "TUMBA POLÍTICA" DEL PRESIDENTE
Luego sólo hay una solución, un referéndum al que se sientan convocados todos los catalanes porque integre los anhelos de las distintas sensibilidades, argumenta Tardá. "Un escenario de exclusión (de una de las opciones) es pan para hoy y hambre para mañana", ha advertido, aviusando de que Cataluñla puede ser "la tumba política" del líder del PSOE.
Sánchez le ha contestado que, ante la existencia de dos bloques antagónicos en Cataluña, la prioridad no debe ser "la independencia, sino la convivencia, que está puesta en cuestión". Por eso el Gobierno está impulsando la "normalización" de las relaciones con la Generalitat como "paso previo a la normalización social", ha explicado.
El presidente ha urgido al independentismo a abrir el Parlament este mes de septiembre para permitir "un diálogo entre catalanes". "Ni más muros, ni más derechas, convivencia. Y en eso estará este Gobierno", ha zanjado.
