Laura Borràs, que concurrió en las elecciones del 14F como aspirante de JxCat a la presidencia de la Generalitat, se convertirá este viernes en la nueva presidenta del Parlament, con el aval del independentismo.
Hasta la víspera de la sesión constitutiva del Parlament ha esperado JxCat para desvelar la incógnita: la dirección ejecutiva del partido que lidera Carles Puigdemont, reunida este jueves por la tarde, ha acordado "por aclamación unánime" postular a Borràs para el cargo, según ha explicado la formación en un comunicado.
Con los 32 votos de JxCat y los 33 de ERC, y con el compromiso de la CUP de no entorpecer su elección, Borràs tiene garantizados los apoyos suficientes para ser elegida presidenta del Parlament, por delante de la candidata socialista, Eva Granados.
No era este el plan A de Borràs, que se presentó a las elecciones del 14F con el objetivo de convertirse en la primera presidenta de la Generalitat de la historia, pero, al quedar JxCat un escaño por debajo de ERC, el timón del Govern recaerá -si hay acuerdo entre fuerzas independentistas- en el republicano Pere Aragonès, y ella ha renunciado a ocupar una vicepresidencia en ese nuevo ejecutivo.
Borràs, representante del ala de JxCat más favorable a la vía unilateral hacia la independencia y menos predispuesta a un diálogo con el Estado en el que no confía, asumirá con toda probabilidad, salvo sorpresa, el cargo de presidenta de la cámara catalana, aunque con la incertidumbre de la causa judicial que arrastra.
Está siendo investigada por el Tribunal Supremo por un presunto caso de corrupción cuando dirigía la Institución de las Letras Catalanas (2013-2018), por lo que una eventual sentencia condenatoria podría inhabilitarla.
La tardanza de JxCat en desvelar el nombre de su candidata a presidir el Parlament ha irritado a la CUP, que de hecho no se ha comprometido a apoyar a Borràs en la votación de mañana y que postula para el cargo a su diputado Pau Juvillà, aunque sí ha garantizado que no maniobrará en favor de Granados ni de cualquier otra candidatura no independentista.
El diputado de la CUP Carles Riera ha expresado su "preocupación" por el nombre de Borràs, aunque ha asegurado que su formación "garantizará" que el presidente de la cámara sea independentista.
El pacto de mínimos entre fuerzas independentistas cierra el paso a Granados, pese a que el candidato del PSC a la Generalitat, Salvador Illa, ha dicho en RAC 1 que corresponde a los socialistas presidir el Parlament al ser la fuerza más votada el 14F.
Lo que decanta definitivamente la votación a favor de Borràs es el apoyo anunciado por ERC, que ya antes de confirmarse su nombre ha emitido un comunicado en el que avanzaba su intención de "apoyar la propuesta de que JxCat tenga la presidencia del Parlament" y facilitar con sus votos la "elección de una secretaría para la CUP".
Dentro de la Mesa, los independentistas aspiran a tener cinco de las siete sillas: la presidencia para JxCat, una vicepresidencia para ERC, y tres secretarías para JxCat, ERC y la CUP, mientras que las otras dos plazas -una vicepresidencia y una secretaría- serían para el PSC, la fuerza más votada en las elecciones del 14F.
ERC ha destacado en un comunicado que con el compromiso alcanzado se garantiza una "mayoría independentista" en la Mesa, en la que también prevé estar el diputado de JxCat Jaume Alonso-Cuevillas como secretario.
Para ERC, el siguiente reto será atar los apoyos para investir a Pere Aragonès como presidente de la Generalitat, en un debate de investidura que deberá tener lugar como muy tarde el 26 de marzo.
Por otra parte, el diputado de Ciudadanos Nacho Martín Blanco será el portavoz de su grupo, un cargo que en la pasada legislatura ocupaba Lorena Roldán antes de fichar por el PPC para el 14F.
En la sesión constitutiva de mañana, que comenzará a las 10.00 horas en un emplazamiento inédito -no en el hemiciclo, sino en el Auditorio del Parlament, más espacioso y ventilado-, otro de los focos de atención será la diputada de ERC Meritxell Serret, recién regresada de Bélgica, después de personarse este jueves por sorpresa ante el Tribunal Supremo para regularizar su situación penal tras tres años huida de la justicia española a raíz del 1-O.
Además, mañana se estrenarán como parlamentarios los 11 diputados de Vox, a quienes arropará hasta las puertas del Parlament su líder, Santiago Abascal.