El Parlamento gallego aprobará este miércoles, 13 de julio, una iniciativa del PPdeG, que ha sido debatida en la tarde de este martes, en la que muestra su rechazo a las propuestas normativas que supongan una minoración o eliminación de las artes de fondo.

La propuesta original del PPdeG emplaza a la Xunta a dirigirse al Parlamento Europeo y a la DG Mare para mostrar ese rechazo, si bien se ha abierto a transaccionar la propuesta con la oposición, de forma que se incluya la aportación del PSdeG de instar también a la Comisión Europea. Además, prevé incluir las aportaciones del Bloque que pasan por pedir un proceso de diálogo con el sector y que se realicen estudios científicos rigurosos, así como del impacto socioeconómico que provocaría en Galicia.

Esta propuesta incide sobre el impacto social y económico que puede suponer la propuesta de la Comisión Europea de veto de la pesca de fondo en 94 zonas comunitarias. Teresa Egerique (PP) censura la "perversión de sus atribuciones" por parte de la CE, que "actuó de un modo despótico al evitar los canales democráticos" para impulsar esa medida.

En su intervención en el pleno en la Cámara, ha remarcado que no hay "artes de pesca malas", sino que depende del uso "irresponsable" que se pueda hacer de ellas. Por ello, tacha de "error absoluto" tratarlas como "perjudiciales".

En esta línea, Egerique subraya el impacto que esta medida podría tener también sobre la flota gallega artesanal, puesto que 875 embarcaciones de este tipo (el 20%) emplea artes de fondo, tales como 'trasmallos', 'miños, 'raeiras' o 'vetas'.

Por su parte, Rosana Pérez (BNG) alerta de que esta "grave" decisión supondría una "brutal bofetada al sector pesquero", una medida sin "argumentos científicos ni técnicos" en la que no hay "diálogo" con el sector. Advierte de que supondría el despiece de más un centenar de arrastreros, "suponiendo que quede clara la no afectación a artes menores", pues de ser así, el impacto socioeconómico "sería definitivamente letal".

Patricia Otero (PSdeG) ha señalado que su grupo comparte la visión de que "así no" se puede actuar, puesto no se puede llevar a cabo esta medida "perjudicial" y "de tanto calado" de una forma unilateral, "sin tener en cuenta a los Estados miembros" y al propio sector pesquero.