Santiago de Compostela acogerá la reunión informal de ministros de Economía y Finanzas (Ecofin) de la Unión Europea los próximos 15 y 16 de septiembre y que reunirá a ministros de 60 países, ya que a la cita asistirán, junto a los 27, otros 33 representantes de América Latina y el Caribe.
España ocupa este semestre la presidencia de turno de la UE y, bajo ese papel, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital en funciones, Nadia Calviño, pretende cerrar algunos de los expedientes más relevantes antes de fin de año y dada la cercanía de las elecciones europeas.
Las sesiones de trabajo de la reunión informal del Ecofin que se celebrará la próxima semana en Santiago se centrarán en el avance de la autonomía estratégica y en el refuerzo de la cooperación económica internacional, especialmente con América Latina.
Y es que en este marco del Ecofin se va a celebrar por primera vez una reunión conjunta con ministros e instituciones financieras internacionales de la región de América Latina y el Caribe, organizada en colaboración con CAF-Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe. Estas reuniones girarán en torno a un tema común: "Hacia una Economía Verde y Digital Global".
DEBATE SOBRE LA REFORMA DE LAS REGLAS FISCALES EUROPEAS
Pero uno de los dosieres "clave" será el de las nuevas reglas fiscales de la Unión Europea, que Calviño confía también en cerrar antes de que acabe el año, ya que existe un "amplio consenso" entre los 27 respecto a los que España ha perfilado como los cuatro pilares del acuerdo: el equilibrio institucional, las salvaguardias comunes, el espacio fiscal para inversiones e incentivos y la garantía de una mayor participación de los países de la UE.
"Tenemos que tener listas las nuevas reglas a finales de año, porque si no lo hacemos ahora, será difícil para la presidencia belga lograr mucho más progreso debido a la celebración de las elecciones europeas, lo que puede resultar en una vulnerabilidad para el próximo año", ha advertido.
Países como Alemania o Países Bajos ya han trasladado a Calviño su apoyo para encabezar la negociación en torno al regreso de unas normas fiscales que, tras cuatro años congeladas por la pandemia y las consecuencias de la guerra en Ucrania, volverán a exigir una reducción del déficit público por debajo del 3% del PIB y una deuda pública por debajo del 60%.
La propuesta de reforma de las reglas fiscales lanzada hace unos meses por Bruselas otorga un mayor poder a los gobiernos para decidir cómo cumplir estos objetivos, aunque exige un ajuste anual mínimo de déficit del 0,5% del PIB hasta llegar al 3%, mientras que plantea una reducción gradual de la deuda a lo largo de cuatro años, prorrogable hasta siete.
CALVIÑO SE DISPUTA LA PRESIDENCIA DEL BEI
Además de estos temas, la reunión informal de la próxima semana podría abordar --aunque no está confirmado-- la discusión y votación sobre las candidaturas a la presidencia del Banco Europeo de Inversiones (BEI), a la que aspira Nadia Calviño. En todo caso, la decisión final corresponde al Consejo de Gobernadores del BEI, que integran los mismos ministros, previsiblemente en octubre.
El Gobierno en funciones presentó formalmente a principios de agosto --tras la celebración de las elecciones generales del 23 de julio-- la candidatura de la vicepresidenta primera para presidir el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Una de las principales rivales para Calviño es la vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea responsable de Competencia, la danesa liberal Margrethe Vestager, quien viene pisando fuerte para sustituir al hasta ahora presidente del BEI, Werner Hoyer.
Del mismo modo, la ministra española tendrá otros tres competidores. Estos son el exministro de Finanzas de Italia bajo las órdenes de Mario Draghi, Daniele Franco, Teresa Czerwinska y Thomas Östros. Estos dos últimos nombres, de Polonia y Suecia, respectivamente, ocupan actualmente la vicepresidencia del BEI.
Dado que la lista oficial ha sido publicada el pasado viernes, ya ha comenzado formalmente el periodo de consultas y, a continuación, se instará a los ministros a que lleguen a un acuerdo "lo antes posible", según han explicado fuentes comunitarias a Europa Press.
Aunque no existe un calendario concreto, las mismas fuentes comunitarias han apuntado que la reunión informal de Santiago será "sin duda" un momento "importante" para las negociaciones y discusiones informales, pero han incidido en que no se trata de un plazo "formal".
El candidato ganador deberá reunir el apoyo del 68% del capital del banco y de al menos 18 Estados miembro. La participación de cada Estado miembro se reparte en función de su peso económico en la UE expresado en el PIB en su entrada en la Unión --España contribuye con el 9,66%-- lo que hace que resulte indispensable el apoyo de las tres principales potencias económicas de la UE: Alemania, Francia e Italia.
Desde su fundación en 1958, el Banco ha tenido 7 presidentes, todos hombres y ninguno español. Así, Nadia Calviño opta a convertirse en la primera mujer presidenta del BEI, "un hito para la institución y para España", destaca el Ejecutivo en funciones.
Nadia Calviño ya ha desempeñado previamente varios cargos en el seno de la Comisión Europea y también en el Fondo Monetario Internacional (FMI), donde sigue siendo presidenta del Comité Monetario y Financiero Internacional (IMFC, por sus siglas en inglés). Fue designada para este último cargo en diciembre de 2021.
Asimismo, desde que forma parte del Gobierno de España, fue propuesta en su categoría de ministra de Economía para presidir el Eurogrupo el pasado verano de 2020. En aquella ocasión, sin embargo, se quedó sin lograr los votos necesarios para ocupar un puesto, que cayó en manos del irlandés Paschal Donohoe.
Sobre su candidatura para presentar el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y su futuro en la política española, Calviño ha reconocido recientemente su "fuerte motivación", aunque ha explicado que lo previsto es que siga como vicepresidenta hasta final de año porque el cargo de presidenta del BEI no lo ocuparía hasta 2024 en caso de ser elegida.
"Yo seguiría de vicepresidenta primera del Gobierno y dirigiendo la política económica del país hasta final de año y hasta cuando procedamos. En este momento yo estoy muy concentrada justamente en seguir dirigiendo la política económica", ha reiterado.