La Audiencia de Granada ha condenado a dos años de prisión y multa de 30.000 euros a cuatro hombres juzgados por cultivar marihuana de manera intensiva en una vivienda en la que fueron intervenidas 430 plantas y donde la Guardia Civil encontró durante el registro a dos menores realizando labores de limpieza de las plantas.
Ante la sospecha de que en la vivienda se estaba cultivando esta droga, los agentes realizaron en la mañana del 14 de abril de 2019 una entrada y registro que dio como resultado la incautación de 430 plantas de marihuana con un peso neto de 9.632 gramos y un valor en el mercado de 14.351 euros, según consta en la sentencia de conformidad dictada por la Audiencia Provincial después de que los acusados reconocieran los hechos.
De hecho, ellos mismos permitieron voluntariamente el registro de la casa cuando se personó la Guardia Civil, que encontró en el interior todo el aparataje y los productos indispensables para el cultivo, como 29 focos halógenos, 29 balastros, un temporizador, cuatro filtros de carbono, cableado, una bomba de agua y un ventilador.
Los agentes comprobaron que en la vivienda había un enganche ilegal de luz para evitar pagar el elevado consumo de electricidad que requieren esta clase de plantaciones, un perjuicio que la compañía eléctrica ha cifrado en 2.779 euros.
Así las cosas, la Audiencia Provincial ha condenado a estos cuatro cultivadores de marihuana como responsables de un delito contra la salud pública y de otro de defraudación de fluido eléctrico a la pena a dos años de prisión y multas de más de 30.000 euros para cada uno, así como a indemnizar a la compañía eléctrica en 2.779 euros.