Alrededor de una quincena de personas llegadas alrededor de las 1,00 horas de este viernes en el primer autobús arribado en la provincia con refugiados procedentes de Ucrania tras el ataque militar de Rusia ha pasado su primera noche con familiares suyos instalados en Granada.
Fuentes conocedoras del operativo, organizado con la propia comunidad ucraniana en Granada, han indicado que el bus procedente de la frontera con Polonia ha llegado a la parroquia del Santo Ángel Custodio, en el barrio del Zaidín de Granada, después de dejar durante el trayecto a otros refugiados en otros destinos en los que se iban a reunir con sus familias.
Las familias granadinas de estos refugiados les han dado atención tras el viaje y hospedaje, han precisado estas fuentes a Europa Press. Se da la circunstancia de que la Archidiócesis de Granada solicitaba este jueves la ayuda de los granadinos para acoger en sus casas a los refugiados que en los próximos días llegarán a la provincia en el marco del dispositivo puesto en marcha por la Iglesia.
Son en su mayoría mujeres y niños por los que las familias habrán de cumplir con unos requisitos que garanticen su seguridad, expuso en la presentación de este dispositivo el arzobispo de Granada, Javier Martínez, que señaló que se abrirán parroquias y si es necesario la Catedral para acoger a estas personas que huyen de la guerra tras la invasión de Rusia.
En la parroquia del Santo Ángel Custodio, que centralizó desde el inicio del conflicto bélico la recogida de ayuda humanitaria en Granada, se celebra desde las 00,00 horas y durante todo el día una adoración eucarística para rezar por la paz en Ucrania, si bien no participan ninguno de los llegados en el autobús mencionado.
La parroquia de Santo Ángel Custodio trabaja desde el primer momento en ofrecer ayuda humanitaria urgente a los ucraniano que huyen del país y a quienes se quedan allí, llevando hasta la frontera esta ayuda donada por los granadinos.
En su comunidad de fieles, se encuentran un grupo de ucranianos y su sacerdote, Svyatoslav Myronyuk, que sintió la urgencia de ponerse manos a la obra para ayudar ante el drama de la guerra que el país sufre tras la invasión de Rusia.
En paralelo, organizaciones no gubernamentales como Cáritas siguen recogiendo material en la capital granadina y el conjunto de la provincia. Este pasado jueves en la tarde agradecía con el Ayuntamiento de Guadix a la ciudadanía accitana "su gran compromiso solidario con el pueblo ucraniano".
A la vez solicitaban donaciones de material necesario y urgente: vendas, prendas interiores de abrigo masculinas, espuma y cuchillas de afeitar, frutos secos, barritas energéticas, chocolate negro y, en general, productos energéticos elaborados y que no requieran preparación culinaria.
