La Plataforma por el Monte Andaluz ha instado este martes a la Consejería de Medio Ambiente a crear un grupo de trabajo científico-técnico para el asesoramiento y formulación de propuestas para la restauración de las zonas afectadas por el gran incendio de Los Guájares (Granada).

Esta plataforma, apoyada por colectivos de distintas provincias, también ha solicitado a la Junta que asesore a personas y entidades propietarias de los terrenos afectados por el incendio -que representan unas 5.000 hectáreas- en la elaboración del plan de restauración al que están obligados por ley.

En dicho plan, ha recordado, se debe evaluar la situación de los terrenos desde el punto de vista de la conservación de la flora, la fauna, el suelo y los ecosistemas, a la vez que se proponen las actuaciones o medidas necesarias para la restauración o regeneración.

La plataforma se ha unido a la petición para que la zona afectada por el incendio de Los Guájares sea declarada catastrófica y ha pedido a las distintas administraciones la apertura de un paquete de ayudas para hacer frente a los gastos que implica realizar las actuaciones oportunas en los ecosistemas afectados.

Según este colectivo, antes de emprender cualquier acción restauradora en montes afectados por incendios, deberá esperarse al menos un año para poder evaluar la capacidad de auto-regeneración de la vegetación autóctona, estudiando al mismo tiempo en cada zona las especies más adecuadas para su restauración.

La redacción del correspondiente plan de restauración debe estar supeditado a los resultados que se obtengan de dicho análisis.

Asimismo, ha advertido de que en los terrenos afectados por incendios queda prohibido por la ley forestal el cambio de uso al menos durante 30 años y el pastoreo durante al menos cinco años y, en todo caso, mientras existan especies forestales susceptibles de ser dañadas por tal actividad.

De igual manera, ha insistido en que existen suficientes datos que asocian la intensidad de los incendios forestales con el cambio climático, que está modificando patrones meteorológicos y provocando sequías cada vez más prolongadas y olas de calor como las de este verano, afectando así la disponibilidad hídrica de los ecosistemas forestales "cada vez más estresados".

Por ello, cree necesario adoptar estrategias de mitigación que ayuden a paliar en la medida de lo posible los daños asociados de pérdida de vidas humanas y materiales.

"El diseño de nuestros montes y dehesas debe cambiar. No podemos seguir asistiendo al triste espectáculo de los incendios de cada verano. Se debe aumentar la educación ambiental generalizada a toda la población, ya que según datos oficiales más del 91 por ciento de los incendios forestales tiene origen humano", ha explicado.

También ha criticado que se haya "dado la espalda" a las inversiones en materia forestal desde hace ya años y gran parte de la ganadería que antes eliminaba un gran sobrante de biomasa vegetal haya ido desapareciendo a pesar del gran papel ecológico que desempeñan ovejas, vacas, cabras, mulos y burros.