El Gobierno andaluz adjudica al Parlamento la responsabilidad de darle una solución a los riegos de Doñana, asegura que “no hará” un informe que base la proposición de ley y tilda de “futurología” la advertencia de la Unión Europea de multar a España si se amplían los regadíos en dicha zona “sobreexplotada”.
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, tras la reunión semanal del Consejo de Gobierno, celebrada en esta ocasión en Linares (Jaén), ha apelado al diálogo “tantas veces sean necesarias” con el Gobierno de España y con los ecologistas para “tener un debate sereno” y dar una “solución a un problema de hace décadas”. Incluso, la Junta ha enviado este lunes una carta al comisario de Medio Ambiente para que tenga una “información seria y fiable”.
Según Moreno, el proyecto de ley impulsado por PP, Ciudadanos y Vox “no es una ampliación de regadíos” como ecologistas u otros partidos han dejado ver. Lo que se intenta es debatir “con la participación de sectores e instituciones” porque “aún no hay nada cerrado y el debate se puede alargar un año”.
El primer debate parlamentario sobre la proposición de ley se producirá esta misma semana en el Parlamento. Sobre ello, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), Joaquín Páez, ha pedido este lunes a Moreno que retire la proposición de ley y que “la Junta sea responsable con los agricultores, con Doñana y con la credibilidad de Andalucía ante Europa”. A dichas palabras, el presidente ha respondido que Páez “se equivoca de interlocutor” porque “no es una iniciativa de su Gobierno, sino de los grupos parlamentarios”.
Al Parlamento acudirá el debate sobre Doñana sin informe previo de la Junta. “No lo habrá”, ha dicho Moreno. Sin embargo, la pasada semana el portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, aseguró que habría informe “en tiempo y forma”.
En el aire queda una posible sanción de la Unión Europea a España en caso de que saliera adelante este proyecto de ley. Esta situación, para Moreno, es “ciencia ficción, futurología” a día de hoy, ya que las multas tendrían que verse en función de que la Comisión Europea vea que la propuesta de ley que salga del Parlamento andaluz “no cumpla” con lo que dice Europa.
Por otro lado, Moreno ha defendido que su Gobierno “es el que más ha invertido en Doñana” tras el “olvido socialista”. Ha asegurado que tiene “una fuerte conciencia medioambiental” y ha mantenido que preservar Doñana “no significa que sea una isla o que haya que poner un muro de hormigón”.
