Una veintena de localidades de Huelva son ya Municipios Orgullosos. Se trata de una iniciativa que nace con la idea de tejer una red de pueblos y ciudades que declaren de una manera pública su apoyo al colectivo Lgtbiq+ a través de diferentes iniciativas que permitan la inclusión en todos los ámbitos.

Esta idea, la Red de Municipios Orgullosos surgió en mayo de 2013, según comenta el coordinador de la iniciativa, Manuel Rosado: "El proyecto nace con una propuesta que me hace mi amigo y compañero Antonio Campillo. Es mayo del año 2013, yo llevaba unos meses en la asociación Adriano Antinoo y me dice, literalmente, que tenemos que llevar el Orgullo a los pueblos".

Así surge la Red de Municipios Orgullosos, por la cual diferentes localidades se adhieren y se comprometen en formar al personal municipal en materia de igualdad Lgtbiq+, celebrar las efemérides más importantes de los colectivos (como el 18 de junio, o el 17 de mayo, entre otros), programar actos culturales relacionados, así como dotar las bibliotecas públicas de libros, dvd, etc. sobre esta temática.

De este modo, poco a poco se han ido adhiriendo más de 180 municipios andaluces, de ellos, una veintena son onubenses, convirtiéndose en la segunda provincia andaluza, después de Sevilla, que cuenta con más Municipios Orgullosos.

Dichas localidades son Aljaraque, Aracena, Almonte, Ayamonte, Beas, Bonares, Cabezas Rubias, Cartaya, Cortegana, Cortelazor, Gibraleón, Hinojos, Huelva, La Palma del Condado, Lepe, Moguer, Paymogo, Punta Umbría, Rociana del Condado, Villalba del Alcor y Villarrasa, además de la Diputación con la que también se realizan actividades conjuntas.

Precisamente, de todos ellos, Rosado ha destacado que Huelva, Almonte y Moguer se están consolidando como los municipios que "más están participando de una manera, además, muy activa".

De esta forma, según ha señalado Rosado la Red participa en la Comisión Lgtbiq+ del Ayuntamiento de Huelva que integra a numerosas entidades que trabajan por los derechos del colectivo y con las que se llevan a cabo, a lo largo de todo el año, numerosas acciones que contribuyan a "avanzar hacia una sociedad tolerante y justa", sobre todo, "encaminadas a apoyar a los menores trans, en la Memoria Lgtb en la antigua cárcel, sobre la que estamos preparando un proyecto muy bonito, y políticas en materia de Intersex, precisamente Huelva es uno de los que más está colaborando en esta materia".

Además, otra de ellas, fue elevar al pleno de junio una moción para seguir defendiendo "de manera clara y contundente" el derecho del colectivo Lgtbiq+ "a la plena igualdad, a la dignidad y al libre desarrollo de la identidad sexual y/o de género", tal y como explicó entonces la concejal de Políticas Sociales e Igualdad del Ayuntamiento de Huelva, María José Pulido.

Asimismo, a través de la Diputación se está preparando un proyecto de guía turística para el colectivo Lgtbi que "ya se ha hecho con otras diputaciones como la de Sevilla o Albacete, y que se pondrá en marcha en Huelva capital". Además, el ente provincial cuenta con un programa "en materia de Igualdad y diversidad bastante interesante". De hecho, desde la entrada de su actual presidenta, María Eugenia Limón, "hemos notado una mayor implicación de la institución".

Por otro lado, Rosado ha avanzado que el Premio Camilo que entrega el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva a la mejor película de temática Lgtbiq+ "va a contar con una mayor relevancia".

Mientras que en Moguer, "uno de los buques insignia de la provincia" se está realizando un programa de turismo y de educación en centros educativos "bastantes interesantes". Y Almonte ha realizado una acción "muy importante" de visibilidad al colocar banderas Lgtbi en diferentes lugares, sobre todo a la entrada de Matalascañas".

"Es decir, siempre se puede hacer más en esta materia, pero estamos muy satisfechos con todo lo que se está moviendo en la provincia y con la ayuda de la Diputación. E incluso pueblos más pequeños como Cortelazor, con unos 400 o 500 habitantes, en plena Sierra de Aracena y Picos de Aroche, tiene un programa de sensibilización con murales", ha abundado.

La iniciativa de los Municipios Orgullosos de Andalucía ha sido tan aceptada que "al principio éramos nosotros los que íbamos ofreciendo esta posibilidad. Más bien, se puede decir que teníamos que convencer al alcalde de turno. A día de hoy, nos cuesta soportar la demanda que tenemos. No por la falta de ganas, sino de recursos", ha revelado Rosado, que ha apuntado, además, que "las administraciones tienen que poner a las personas Lgtbiq+ (en torno al 12%) y a nuestras familias en primera línea de acción, como ocurre con la igualdad de una manera transversal".

El título de pueblo o municipio 'Orgulloso', ha descrito Rosado "va más allá", puesto que no sólo supone un reconocimiento y la apertura de "espacio plural de convivencia", sino que "en realidad, es formar parte de una asociación formada por alcaldes y concejales de (casi) todos los colores políticos, técnicos y entidades LGTBI en las que se trabaja en red por un objetivo común. Esto permite trasladar las buenas propuestas de unos pueblos a otros, de unas provincias a otras, así como optimizar recursos y crear empatías pero siempre desde el municipalismo".

"El simple hecho de que el alcalde del pueblo sujete con orgullo la bandera arcoíris y predique públicamente un manifiesto en favor de la diversidad, es una herramienta que empodera a estas mujeres y a estos hombres", ha concluido.