Tras un día de descanso, las preliminares del concurso de agrupaciones del Carnaval de Huelva reiniciaron este lunes su curso, aunque serán de nuevo interrumpidas este miércoles y jueves dentro de los tres días de luto oficial decretados por el Ayuntamiento por el fallecimiento de tres estudiantes en el incendio de una vivienda este martes. Por ello, las sesiones en el Gran Teatro se retomarán el viernes.
En esta tercera jornada de preliminares, el teatro ha vuelto a lucir de fiesta sin butacas vacías y con muchas ganas de carnaval. El nivel en estos tres primeros días es más que aceptable y empiezan a incrementarse los nervios a medida que se pasean por los escenarios los diferentes repertorios. Solo podrán quedar los finalistas y la competitividad es más que visible entre los grandes rivales de un certamen que está superando con creces las expectativas, siendo el de chirigotas el más ‘apretujao’ hasta la fecha.
Hay detalles que me gustan de las diferentes agrupaciones, como dejar espacio entre los componentes para que se pueda observar al guitarra hacer los punteados de inicio, algo que se agradece. Por otra parte, incomoda en exceso la falta de respeto constate e interrupciones a las agrupaciones mientras cantan. El que desee protagonismo debería ‘currarse’ los largos meses de ensayos y subirse a las tablas.
El telón del Gran Teatro de Huelva se abre en este tercer día para recibir a la chirigota de Punta Umbría, ‘To pa mí. Los interesados’. Una nueva agrupación en el concurso Colombino con integrantes con mucha experiencia, que supieron ganarse los aplausos del Templo carnavalero. Repertorio muy decente con un bonito pasodoble en música y simpáticos cuplés. Suenan muy afinados y saben conjugar bien el tipo. Se crecen en el popurrí y dejan el ambiente a buen nivel. Por cierto, la próxima la pago yo. Otra de las agrupaciones que me gustaría ver en la semifinal.
La comparsa de Víctor Quintero y Nelly Conde, ‘La vieja verde’, muestra sus credenciales en su primer pase del concurso, tras su participación en el certamen de coplas en el Falla. La calidad de este grupo es latente durante todo el repertorio, con una admirable afinación y una madurez escénica que ‘se beben’ el escenario. Pocos grupos defienden el repertorio como los de Quintero y Conde, donde las voces se imponen y marcan el ritmo de este concurso. Destacar el “Pasodoble a doble rasero a la crítica sobre la letra de esta agrupación, desplegando el ingenio y solventando adversidades desde perspectivas variables que emergen en entornos hostiles, apelando al respetable infravalorado y despojándose así de la responsabilidad”. Letra que levanta al público y deja clara sus intenciones. Decía hace años Antonio Cabezas: “Yo soy responsable de lo que escribo, no de aquello que los demás entiendan”. Buen popurrí que mantiene en vilo al respetable desde sus inicios y abre el camino para estar entre las laureadas de este certamen. Por cierto, precioso disfraz de Daniel Lozano, el más espectacular hasta la fecha.
Desde Valverde nos llegó la chirigota ‘Los FP’, de José Ángel Garrido, que se presentan por primera vez en este concurso. Despliegan sus mejores armas mostrando una ‘chirigota acuartetada’ llena de simpáticas parodias con referencias constantes a carnavaleros. Público entregado y disfrutando de un repertorio ‘rosa’, que se ganó la simpatía del coliseo, obviando las posibles carencias en otros aspectos. Muy buen repertorio que no dejó de hacer reír en todo momento, mostrando muy buenas sensaciones.
La comparsa ‘Los desobedientes' de Manuel ‘El púa’ llega con rabia y así lo muestra en su actuación. Nueva propuesta para estos rebeldes que también participarán en el concurso del Carnaval de Málaga. Destacar su primer pasodoble a las letras del pasado concurso, en la que fueron objeto de cierta sorna, algo que particularmente, esperaba. Letra directa, sin remiendos y muy sentida por los integrantes, que transmitieron con indignación. Bonito guiño a Roque Rodríguez, algo que se agradece.
La noche la cerró la veterana Colombina con un tipo muy relajado: ‘Nuestro retiro’, siendo el Conquero y la Ría de Huelva sus lugares de preferencias para conectar con la paz y una alimentación saludable, algo que ni ellos se creen. Años de tablas que siguen emocionando al público y un respeto enorme por quienes siguen manteniendo esa llama viva. Como casi siempre, temática muy localista que fue despedida con una gran ovación.
