Agentes de la Unidad del Cuerpo Nacional de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía, pertenecientes a la Jefatura Provincial de Huelva, han instruido diligencias penales por las cuales han imputado un delito contra el medio ambiente al responsable de un
negocio clandestino de recuperación de chatarra en Cartaya, que almacenaba 12 toneladas de residuos.
Según ha indicado la Junta en una nota, la intervención policial tuvo lugar el pasado 24 de abril, aunque semanas antes, los agentes especializados en la protección del medio ambiente detectaron una parcela en la localidad de Cartaya donde se almacenaba "gran cantidad" de chatarra "sin ningún control ni medidas de seguridad".
Según ha indicado la administración andaluza, en el recinto se almacenaban "gran cantidad" de aparatos refrigeradores y otro tipo de electrodomésticos de similar naturaleza en desuso y en diferente estado de desmantelamiento.
Así, los agentes comprobaron que la actividad que se realizaba en la parcela estaba organizada y disponía de una zona para la recepción de los aparatos, otra para la realización de las operaciones de desmantelamiento de sus piezas; y otra destinada al compactado y almacenamiento incontrolado de chatarra.
En ese sentido,
la mayoría de los electrodomésticos encontrados tenían seccionados los conductos refrigerantes, lo que habría permitido la emisión de gases clorofluorocarbonados, "que causan un grave perjuicio a la capa de ozono" y el vertido de aceites igualmente contaminantes.
Además, la parcela donde se realizaba esta actividad ilícita se encuentra muy cercana a cultivos y al canal del río Piedras, que abastece de agua a varios municipios de esta zona onubense.
Por lo tanto, las diligencias policiales han sido remitidas a la autoridad judicial y a la Fiscalía de Medio Ambiente quienes determinarán la responsabilidad penal del responsable de estos hechos.