Greenpeace y Ecologistas en Acción han lamentado que la Junta de Andalucía haya otorgado la Autorización Ambiental Integrada (AAI) al proyecto de sellado de fosfoyesos de Fertiberia ya que con ello "condena el futuro de las marismas del Tinto" en Huelva.
Ambas organizaciones, a través de un comunicado, han expresado su pesar por que la AAI no tome en consideración las conclusiones del Comité de Expertos de la Universidad de Huelva convocado en su día por el Ayuntamiento de Huelva, el cual viene a constatar las reclamaciones que ambas organizaciones ecologistas vienen demandando desde hace años.
El proyecto presentado por Fertiberia "no puede ser considerado como una solución definitiva para la restauración y recuperación de las marismas afectadas por las balsas de fosfoyesos. El estudio confirma la falta de estabilidad del fosfoyeso, por lo que el sellado de las mismas no debería considerarse una solución definitiva", han indicado.
Consideran que lo mismo podría afirmarse de la necesaria actuación en las tres zonas de las balsas, con importantes problemas de vertidos a la Ría, cuya solución no se ha tomado en consideración en el proyecto presentado por Fertiberia.
Las organizaciones creen que la Junta "está condenando el futuro de las marismas del Tinto, enterrando los más de cien millones de toneladas de residuos tóxicos, peligrosos y radiactivos, tal y como determinó el Parlamento Europeo, tras su visita al lugar y que son derivados de la producción de ácido fosfórico".
Estos residuos fueron vertidos por la empresa Fertiberia y Foret en una zona de dominio público de marismas mareales y cauces públicos del río Tinto durante 43 años.
Precisamente por la dinámica ecosistémica del lugar en el que se emplazan, las organizaciones ecologistas llevan años advirtiendo lo que el informe de expertos de la Universidad de Huelva apuntaba, el sellado de las balsas de fosfoyesos no está totalmente asegurado debido a la inestabilidad y dinamismo de los suelos sobre los que se asientan.
Es por ello que siguen exigiendo "la retirada de los residuos, la recuperación de las características originales del espacio afectado y la restauración de los hábitats destruidos, así como que la empresa no se vaya de rositas tras haber protagonizado uno de los mayores casos de contaminación ambiental de Europa".
Las organizaciones ecologistas recuerdan que el vertido de residuos se realizó sin autorización y camuflado bajo una concesión para el vertido de aguas residuales y por eso "resulta incomprensible que desde las administraciones competentes se acepte crear un depósito permanente de residuos de dimensiones gigantescas, derivado de un vertido ilegal, con componentes tóxicos como metales pesados e incluso radiactivos".
Réplica de la Junta
Por su parte, el consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández-Pacheco, ha defendido este jueves que el proyecto presentado por Fertiberia para la restauración de las balsas de fosfoyesos de Huelva, a la que la Junta le ha concedido la Autorización Ambiental Integrada, es "la mejor de cuantas podían acometerse", ya que es la que cuenta "con mayor aval y garantía".
A preguntas de los periodistas antes de acudir a la apertura del 20 Congreso Nacional de la Recuperación y el Reciclado en Marbella (Málaga), el consejero ha reiterado que los fosfoyesos es "un problema que se viene produciendo desde hace ya muchísimos años", pero "hasta ahora nadie había hecho absolutamente nada".
"El Gobierno de Andalucía, desde que tiene esta responsabilidad, se puso manos a la obra para dar una solución definitiva. Y esta solución, a la que la Consejería de Sostenibilidad ha otorgado la Autorización Ambiental Integrada, es la mejor de cuantas podían acometerse. Tal es así que cuenta con el visto bueno del Ministerio para la Transición Ecológica, que en sus días otorgó la Declaración de Impacto Ambiental y el visto bueno unánime del Consejo Nacional de Seguridad Nuclear", ha explicado.
Así, ha remarcado que "de todas las posibilidades analizadas por los técnicos, esta es la que cuenta con mayor aval y garantía, tanto por parte de la Junta de Andalucía como por parte del Gobierno de España", por lo que "cuando dos administraciones que cuentan con grandes profesionales en la materia avalan la solución, yo creo que tenemos que lanzar un mensaje de tranquilidad absoluta a los onubenses".
En este sentido, el consejero ha subrayado que se van a invertir "más de 60 millones de euros" para que ese paisaje onubense "marcado por esa balsas pase a ser historia, se restaure ambientalmente y, lo más importante de todo, para que se garantice la seguridad de los ciudadanos".
