Un total de 22 familias afectadas por los robos de bebés supuestamente nada más nacer entre las décadas de los 50 y 90 se han realizado finalmente este viernes la prueba de ADN en una reunión mantenida por los miembros de la asociación SOS Bebés Robados en Huelva en la Gota de Leche, con muestras que serán depositadas en el laboratorio Neodiagnostica a la espera de una coincidencia con el fin de encontrar a sus familiares.
   Así lo ha explicado a Europa Press la presidenta de SOS Bebés Robados Huelva, Esperanza Ornedo, que también ha expuesto que en el encuentro se ha confirmado que en los próximos días los afectados comenzarán a llevar su caso de forma independiente al Tribunal Constitucional (TC).
   Este recurso se elevaría sobre el auto que dictó la Audiencia Provincial onubense en el que los nueve magistrados llegaron a un acuerdo y decidieron cerrar la vía penal a los casos de bebés robados supuestamente al nacer al considerar que todos los delitos en los que pudieran sustentarse los mismos han prescrito, tras descartar que exista detención ilegal en los supuestos de sospechas de entrega de un niño nacido a terceros para alterar la filiación.
   "A pesar de la decisión de la Audiencia siguen llegando nuevos afectados que quieren seguir adelante con el tema", ha subrayado Ornedo, que también ha expuesto que a la reunión ha asistido, para "animar a los asistentes", Enrique, el onubense de 47 años que sospechaba ser un bebé robado en 1965, año en el que nació en un hospital del norte de España, y que ha encontrado a su madre biológica tras depositar su muestra.