Ence ya ha dado cifras concretas sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que prepara para toda su plantilla a nivel nacional, y la factoría onubense es la peor parada, ya que del total de 144 trabajadores a los que afectará el ERE, 50 son de Huelva, 49 de la planta de Navia (Asturias), 39 de la de Pontevedra y seis de las oficinas centrales de Madrid.
Según estos datos ofrecidos por Ence, más de un 16% de la plantilla onubense se iría a la calle, al contar con alrededor de 300 trabajadores, de los que 50 sobran para la empresa.
Sin embargo, los trabajadores de la empresa de celulosa, tanto los onubenses como el resto, no van a permanecer impasibles y ya han advertido este jueves en un comunicado que “no admitirán ningún despido”, por lo que están estudiando medidas para contrarrestar este “ataque”, como movilizaciones y huelgas.
En un comunicado remitido tras la segunda reunión mantenida por la presentación y negociación del ERE, califican de “demencial” la medida adoptada por la empresa “para intentar paliar” la bajada de beneficios provocada por la nueva ley energética, y subrayan que “sólo carga contra los trabajadores para poder mejorar sus beneficios”, y no toma otras medidas “como el no repartir los dividendos” tras un ‘cash-flow’ de 104 millones que han generado un beneficio de 43 millones de euros en 2012.
Así, lamentan que la compañía no valora las subidas de producción de pasta de las factorías, “que son mejores que los valores que han tomado para el informe, que no se han presentado previsiones reales sino catastrofistas, que no se plantean revisión de salarios de altos cargos ni otras medidas menos traumáticas”.
Además, remarcan que la empresa no puede demostrar que en los últimos tres trimestres haya tenido pérdidas, por lo cual no entienden que esté “legitimada, ni legal ni moralmente, para presentar este ERE”.
Protestas
Antes de conocerse estos datos y que se iniciara el periodo de negociaciones, los trabajadores de la planta de Huelva protagonizaron una concentración a las puertas de la factoría el pasado martes, una escena que se repitió en todas las plantas de la empresa de celulosa.
Además, este miércoles advertían de que preparaban acciones para poner frente al expediente laboral, no descartando la convocatoria de una huelga indefinida.